¿Qué es el golpe de calor infantil y qué hacer en caso de emergencia?

Cuando suben las temperaturas, son frecuentes los casos de golpe de calor en los niños y bebés. Todos sabemos que los pequeño son muy sensibles a los cambios de temperatura, pero pocos conocemos la gravedad de un golpe de calor. Un día de calor en la playa, piscina, o en otro lugar al aire libre puede pasar de ser un día de placer para convertirse en un día de pesadilla. Debemos disfrutar del buen tiempo, pero con precaución. Te explicamos ¿qué es el golpe de calor infantil y qué hacer en caso de emergencia?

¿Qué es y qué síntomas manifiestan los niños con un golpe de calor?

El golpe de calor es la alteración más grave de la regulación térmica. Se trata de una respuesta del cuerpo a una pérdida excesiva de agua y sal contenidas en el sudor. Las causas del golpe de calor se deben a una exposición excesiva al sol, por no estar adecuadamente hidratado o protegido con lociones apropiadas.

Los bebés y los ancianos son los grupos que tienen mayor riesgo de padecer un golpe de calor junto a las personas que se ven obligadas a trabajar en épocas de calor expuestas al sol, los que padecen de diabetes, insuficiencia cardíaca o tensión alta, los obesos y los alcohólicos.

En el caso de los niños, su sistema de regulación térmica aún no está completamente desarrollado, lo que hace que tengan más dificultades para adaptarse a las temperaturas extremas. Esto significa que su cuerpo no es muy eficiente para enfriarse a través del sudor como el de un adulto.

Por eso y en condiciones de mucho calor, su temperatura corporal puede subir muy rápido, desencadenando un golpe de calor en minutos. El golpe de calor no solo puede producirse al estar en la playa o bajo el sol, sino también en lugares cerrados o poco ventilados, como automóviles, por ejemplo.

También el uso excesivo de ropa o la actividad física intensa bajo el calor favorecen su aparición. Otro factor es la deshidratación, ya que si un niño no ha ingerido líquidos, su organismo no contará con los recursos que necesita para regular la temperatura corporal de forma adecuada.

Por eso es fundamental reconocer los primeros signos de advertencia para que puedas actuar de inmediato. La temperatura corporal de los niños en los casos de golpe de calor llega a superar los 40 °C (104 °F), lo cual representa por sí misma una emergencia médica que requiere de pronta atención.

Síntomas del golpe de calor en niños - Tips para identificarlos a tiempo

La mayoría de los golpes de calor tienen lugar en días soleados, pero también se pueden producir a la sombra o en los días bochornosos. Entre los síntomas más comunes que afectan a los bebés y a los niños, podemos citar los siguientes:

• Irritabilidad e incomodidad
• Piel muy irritada por el sudor en el cuello, pecho y axilas
• Calambres musculares
• Agotamiento, cansancio y debilidad
• Mareos, náuseas y vómitos
• Dolor de cabeza
• Desmayos o pérdida de consciencia
• Deshidratación

En los casos más graves, también puede presentarse una aceleración del ritmo cardíaco (que se conoce como taquicardia), respiración rápida, confusión o dificultad para coordinar movimientos. Si el niño está somnoliento o con dificultad para responder a estímulos, es también una señal de alarma que indica que el golpe de calor va avanzando hacia una forma más severa.

La piel del pequeño puede notarse caliente y seca al tacto, lo que indica que el cuerpo ha dejado de sudar, una señal crítica de que su sistema de enfriamiento ha fallado. En los bebés, se puede observar una fontanela (la parte blanda del cráneo) hundida como signo de deshidratación, así como llanto sin lágrimas y sequedad en la boca, enrojecimiento en la cara y escalofríos.

También puede presentarse una fiebre elevada sin causa infecciosa aparente. En estos casos, debes acudir al centro de salud más cercano o contactar a emergencias, recuerda que cuanto más pequeño es el niño, más rápido evoluciona el golpe de calor. Por eso, la detección precoz de los síntomas y una intervención rápida marcarán una gran diferencia en su recuperación.

Cómo debes actuar si se presenta un golpe de calor en un bebé

Si notas que tu bebé presenta algunos de los síntomas anteriores, debes actuar de la siguiente forma:

• Ofrece suero casero (limonada alcalina) o agua al bebé. La limonada alcalina se puede preparar con la mezcla de un litro de agua, el zumo de dos limones, un poco de sal, una cucharada de bicarbonato sódico y azúcar al gusto
• Ofrece leche del pecho al bebé lactante
• Lleva al bebé a un lugar fresco y ventilado, o con aire acondicionado
• Quita toda la ropa al bebé
• Ducha al bebé con agua fresca
• Deja que el bebé descanse

En el caso de que el bebé no responda a estas animaciones, busca orientación médica inmediatamente. Eso sí, evita envolverlo en mantas o abrigos, aunque presente escalofríos, porque esto podría elevar su temperatura corporal. Tampoco se deben administrar paracetamol o ibuprofeno para bajar la fiebre si no es bajo estricta indicación médica, ya que podrían empeorar el cuadro.

El uso de ventiladores es útil, pero mientras no estén dirigidos directo al bebé. Lo ideal es crear una corriente suave de aire en la habitación, además de colocar paños húmedos en la frente, axilas o ingles del bebé. En casos avanzados, si el pequeño está somnoliento, tiene respiración agitada o ha perdido el conocimiento, llama a emergencias o ve inmediatamente a un hospital.

El golpe de calor puede derivar en daño a órganos vitales si no se trata con rapidez debido a la falta de regulación térmica. Durante los minutos previos a recibir la atención médica, los padres deben seguir enfriando al bebé, para mantenerlo hidratado si está consciente, y vigilando continuamente su respiración y pulso, cualquier variación debe tratarse por el médico.

9 consejos eficaces para evitar los golpes de calor en la infancia

Los golpes de calor se pueden prevenir siguiendo estas recomendaciones:

1. Ofreciendo líquidos (agua o zumos naturales) a los bebés y niños, con frecuencia
2. Dando el pecho a demanda al lactante
3. Realizando varias comidas ligeras a lo largo del día y a ser posible frescas o a temperatura ambiente
4. Bañando a tu hijo con más frecuencia
5. Realizando actividades más relajadas a los niños
6. Manteniendo a los más pequeños protegidos del sol, principalmente en las horas de más calor
7. Procurando estar en lugares frescos y ventilados
8. Vistiendo a los bebés con ropa ligera, de algodón
9. Evitando estar mucho tiempo dentro del coche

Este punto es muy importante: JAMÁS dejes al niño dentro del coche, ni por unos minutos, porque el interior del vehículo puede alcanzar temperaturas peligrosas en pocos minutos, así dejes las ventanas entreabiertas. Esto se traduce en una de las causas más comunes de golpe de calor en el verano. También evita la exposición directa al sol entre las 11:00 AM y las 5:00 PM.

Si es necesario que salgan, usen sombreros de ala ancha, gafas de sol con protección UV y protector solar, renovándolo cada dos horas. Los niños deben vestir ropa clara, ligera y transpirable. Los tejidos como el algodón o el lino son ideales para mantener el cuerpo ventilado. Si hace deportes o juegos al aire libre, pide que haga pausas frecuentes a la sombra y dale líquidos de forma continua.

Finalmente, adapta tu entorno: usa cortinas para bloquear el sol, evita encender electrodomésticos que emitan calor, y supervisa el uso del aire acondicionado o ventiladores. También debes permanecer atenta a las alertas de altas temperaturas, sobre todo durante épocas de calor, para que puedas anticiparte y tomar las medidas preventivas con antelación y proteger a tus hijos.

Puedes leer más artículos similares a ¿Qué es el golpe de calor infantil y qué hacer en caso de emergencia?, en la categoría de Primeros auxilios en Guiainfantil.com.