Menú para bebés de 0 a 3 meses - Siempre leche materna o leche de fórmula

Debido a sus innumerables beneficios para el bebé y la madre, el menú para bebés de 0 a 3 meses siempre es la leche materna o leche de fórmula. Como bien sabemos, la leche materna es el alimento exclusivo e ideal para el bebé durante sus primeros 6 meses de vida y en ciertos casos se puede auxiliar la alimentación del recién nacido con biberones de leche de fórmula, en estos casos se llama lactancia mixta Además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que no se debe comenzar con la alimentación secundaria o introducción de otros alimentos hasta que el pequeño cumpla los 6 meses de edad y que haya alcanzado ciertos hitos del desarrollo psicomotor.

Estos son: sentarse con apoyo, adecuado sostén de su cabeza, ser capaz de agarrar los alimentos con las manos y llevárselos a la boca y desaparición del reflejo de extrusión (expulsión de alimentos sólidos con la lengua). Luego de los 6 meses, la OMS también recomienda continuar con la lactancia materna hasta los 2 años de edad o hasta que mamá y bebé decidan. En caso de que no sea posible que des lactancia materna a tu bebé, podrás consultar al pediatra acerca de las leches infantiles adaptadas al grado de maduración de su sistema digestivo.

Leche materna, alimento principal del bebé los 3 primeros meses de vida

Debido a sus múltiples propiedades, la leche materna le aporta al bebé los nutrientes necesarios para su adecuado crecimiento y desarrollo, por eso es la mejor opción para el bebé y se considera el menú principal de los recién nacidos. Los riesgos de salud tales como muerte súbita del lactante o afecciones o infecciones gastrointestinales, respiratorias y urinarias son mucho menores en bebés que son alimentados mediante la leche materna. ¿Cuáles son los beneficios de la leche materna para la madre y el pequeño?

- Se trata de la forma más natural de alimentar al bebé que tiene como valor añadido la creación de lazos afectivos y emocionales, así como el hecho de favorecer el contacto piel con piel, método que tiene evidencia científica para acelerar la ganancia de peso en bebés prematuros o de bajo peso al nacer.

- Los riesgos para la salud infantil, tales como el síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL), infecciones gastrointestinales, respiratorias y urinarias, además de enfermedades metabólicas como diabetes y obesidad, son mucho menores en bebés que son alimentados mediante la leche materna.

- Dar el pecho al bebé también favorece un correcto desarrollo mandibular del niño, lo que a su vez influye positivamente en el buen desarrollo de los músculos que participan en la masticación y el lenguaje. También disminuye la incidencia de depresión postparto e incluso facilita la recuperación del peso de la madre.

- ¿Sabías que la leche materna también se digiere mejor? ¡Es el mejor menú! La leche materna contiene probióticos, los cuales son microorganismos vivos beneficiosos y especialmente saludables para los bebés, que una vez ingeridos pasan a formar parte de la llamada microbiota intestinal. Las bacterias más ampliamente estudiadas son las de los géneros Lactobacillus y Bifidofacterium, éstas juegan un papel clave y fundamental en la salud intestinal, regulan elementos inmunológicos o de defensa como los anticuerpos, tienen función anti inflamatoria y además previenen enfermedades metabólicas a largo plazo en el bebé. También existe menos probabilidades de que el bebé tenga cólicos o gases.

- Además, la leche materna siempre está disponible a la hora que el bebé demande, a la temperatura adecuada y no precisa ningún tipo de preparación. Para algunas mamás puede resultar un poco abrumador llevar a cabo la lactancia materna, siempre tienes que estar cerca de tu pequeño por si pide el pecho, pero seguro que te reconforta leer todo lo bueno que para él supone.

- Por otro lado, cabe mencionar el efecto positivo para el medio ambiente que supone amamantar. Al no consumir envases de leche de fórmula no se contribuye ni a su proceso de envasado ni tampoco de transporte, procesos en los cuales se utilizan grandes cantidades de recursos naturales tan vitales como el agua.

-También existen múltiples beneficios para la madre, dentro de los cuales podemos destacar que facilita la recuperación del peso materno, además las hormonas que se liberan durante el acto de lactar ayudan a que el útero regrese a su tamaño normal de manera más rápido, disminuye el sangrado post parto por lo que se reduce el riesgo de anemia en la madre, e incluso a largo plazo disminuye el riesgo de cáncer de mama y ovario.

Cómo amamantar al bebé de 0 a 3 meses de edad

Tras la subida de la leche materna en el hospital, el pediatra, la matrona o la enfermera te aconsejará sobre la postura que debes adoptar para dar de mamar a tu pequeño, unos consejos que te vendrán muy bien, sobre todo si es tu primer hijo, ya que empezarás con una experiencia maravillosa y es de vital importancia que te sientas acompañada y con plena confianza en que la naturaleza te ha dado todas las herramientas para hacerlo.

De las primeras succiones que realiza el bebé sale el calostro: un alimento de color amarillo, de consistencia cremosa y densa, que está compuesto por inmunoglobulinas, proteínas, agua, grasas y carbohidratos ¡sin duda un superalimento para el bebé! Es muy importante que tu hijo tome esa primera leche del menú porque tiene un papel protector fundamental a nivel inmunológico y ayuda a un adecuado funcionamiento de su sistema digestivo. El calostro se produce en poca cantidad, pero su concentración de nutrientes y factores protectores es tan alta, que sólo esas pequeñas gotas es lo que tu bebé necesitará durante sus primeros 3 días de vida.

Salvo que el doctor te indique otra cosa, la recomendación general es darle de mamar a demanda, es decir, siempre que el bebé lo pida. Piensa que un recién nacido o un bebé de unos pocos meses de vida no tiene horario, y al inicio puede comer cada hora, pero, tranquila, poco a poco irá distanciando las tomas y haciéndolas más cortas. Al principio puede que necesite estar más tiempo en cada pecho, pero luego tendrá suficiente con un periodo más breve.

Alimentando al bebé de 0 a 3 meses con leche de fórmula

Si no puedes o decides no darle el pecho a tu bebé o tan solo se lo das unas semanas, no tienes por qué sentirte culpable ni mucho menos pensar que tu bebé no va a estar bien alimentado.

Sí que es cierto que la leche materna tiene ventaja sobre la leche de fórmula por ser más natural, y tener factores inmunológicos y células vivas que protegen a tu bebé de muchas enfermedades, pero las formulas infantiles que existen hoy en día también cuentan con excelentes cualidades nutricionales que garantizan que el bebé tenga todos y cada uno de los nutrientes, vitaminas y minerales que necesita para su correcto desarrollo físico y mental, en el caso que la leche materna no esté disponible. Digamos que es un menú alterno.

A la hora de elegir la mejor leche de fórmula para tu bebé, lo indicado es que te dejes aconsejar por tu médico. Él será quien mejor te pueda decir acerca de la leche en concreto que puede tomar tú bebé, así como de la medida de los biberones y el procedimiento para prepararlo correctamente, siempre acorde a su mes de vida, peso, estatura y condiciones de salud. Cuando estés en la consulta no temas hacer todas las preguntas, tener las ideas claras te ayudará a estar más tranquila.

De igual modo, puedes pedir consejo en tu grupo de crianza con la matrona o con el doctor acerca de los biberones y las tetinas más adecuadas para incluirlos en el menú de tu pequeño. Muchas veces vemos tantas opciones en el mercado que nos resulta todo un mundo hacer la elección. Recuerda que también es importante cambiar las tetinas de vez en cuando, o cuando veamos que empiezan a estar deterioradas.

Por norma general podemos distinguir 3 grupos de leches o fórmulas infantiles, pero, como te decíamos, antes de dársela a tu bebé consulta con tu pediatra:

• Fórmulas de inicio: Desde el nacimiento hasta los 6 meses.
• Fórmulas de continuación: Desde los 6 meses hasta los 12 meses.
• Fórmulas de crecimiento o de vaca: A partir de los 12 meses.

La leche de vaca entera sin modificar, no se considera una formula infantil. Sin embargo después del año de edad, si lo deseas puedes introducirla en pequeñas cantidades previa conversación con el pediatra de tu bebé, ya que su exceso puede conducir a algunos trastornos intestinales y anemia.

Existen otras fórmulas más especializadas que se utilizan en determinadas condiciones de salud de los bebés como las formulas a base de soya. La alimentación de tu pequeño bebé durante sus primeros 0 a 6 meses de vida es importante y determinante para su salud, amamantar es un proceso hermoso pero puede ser en ocasiones muy demandante física y mentalmente y pueden presentarse obstáculos que te impidan llevarla a cabo.

Sin embargo, no olvides disfrutar ese proceso porque pasa muy rápido, busca un profesional pro lactancia que te haga sentir tranquila, te aclare todas las dudas y te genere confianza. Apóyate en tu familia para sentirte más segura, pero si no puedes o sencillamente tu decisión es no dar el pecho a tu bebé no debes sentirte culpable por ello: sigues siendo la mejor madre del mundo para tu querido bebé.

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