Cómo aliviar con reflexología el cólico del lactante

El cólico del lactante es un problema muy frecuente en las consultas de pediatría. Se suele diagnosticar en el 15-40% de los niños en los tres primeros meses de vida, independientemente del tipo de lactancia con la que sean alimentados, materna o artificial.

Tiende a presentarse en lactantes con temperamento sensible y menor necesidad de sueño de lo normal. El bebé puede llorar a ratos o casi todo el tiempo y al final de la tarde suelen estar tremendamente irritables, pero podría darles el cólico en cualquier momento del día.

Posibles causas del cólico del lactante

Como padres, este problema puntual os generará una gran ansiedad y mucha preocupación debido al llanto, pero recordad que es un proceso benigno que se resolverá de forma espontánea entorno a los cuatro meses, no dejando ningún tipo de secuelas al bebé.

Mucho se ha hablado de las causas y muchos son los trabajos de investigación relacionados con el cólico, pero la realidad, es que actualmente se desconoce la causa exacta del cólico del lactante. Las causas digestivas que presentan los niños parecen estar relacionadas con la inmadurez del intestino del recién nacido, puede haber alergia a las proteínas de la leche de vaca, hipermotilidad, gases y algo que no debemos descartar nunca, las causas psicológicas. Nuestras actitudes y pensamientos, junto con nuestro estrés y  ansiedad son percibidos por nuestro bebé.

Síntomas comunes del cólico del lactante

Vuestro pediatra será el más indicado para diagnosticar a vuestro bebé el cólico de lactante, pero aquí os dejo una lista de los síntomas más habituales

- Crisis de llanto inconsolable, frunce el ceño y suelen ponerse muy rojos por el llanto

- El bebé se pone rígido, está inquieto, irritado, molesto, agitado; parece tener hambre pero no se calma con la comida o al pecho

- Flexiona las piernas sobre el abdomen y presenta un abultamiento en la tripa por acumulación de gases en el intestino.

- Puede darse regurgitación de la leche, estreñimiento o colitis

Consejos par aliviar los cólicos del lactante

La práctica de reflexología en bebés requiere una atención especial. Las manipulaciones deben ser más sutiles y suaves que en un adulto. Esto es debido a que el bebé tendrá dolor en los reflejos que representan el sistema digestivo en el pie, sobre todo, en el intestino grueso y el intestino delgado, y no permitirá que le toquemos si le hacemos daño. Por tanto, los movimientos deben ser certeros y enérgicos pero suaves y la presión se irá aumentando de forma gradual.

La posición para dar la técnica de reflexología será la más cómoda para el bebé y para quien realice el masaje, tratándose de reflexología podal, buscaremos la posición que nos permita ver la planta de los pies del bebé. Tumbado sobre nuestras rodillas cuando su tamaño aún no es muy grande es una de las favoritas y tumbado en la cama o en el sillón, es la elegida cuando su longitud ya no nos permite la posición anterior, pero sobre todo y lo más importante es la comodidad de quien va a realizar el masaje.

Debemos de estar relajados, cómodos y con la sensación de que el tiempo se parará durante el masaje. Le hablaremos al bebé mientras le trabajamos usando una voz cariñosa y cálida. Recuerda que para el adulto apoyar la espalda sobre algo estable que la mantenga recta ayuda a estar relajado y no en tensión.

La frecuencia para realizar la técnica en casos de cólicos será diaria intentando evitar el momento de crisis. El motivo es adelantarnos para evitarla, pero si tuviéramos que realizarla en el momento de crisis, se podrá realizar sin ningún miedo. Pero recuerda, que si la técnica está bien aplicada el alivio de los síntomas del cólico serán evidentes desde el primer día.

Las zonas reflejas a tratar son: Plexo Solar, Glándula Pituitaria, Cabeza, Meridianos, Esófago, Estómago, Intestino Delgado, Intestino Grueso, Columna Nervio Vago, Ganglios Linfáticos, Drenaje Linfático.

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