San Valentín para niños - Actividades para el 14 de febrero más amoroso

San Valentín no tiene por qué ser una celebración exclusiva de los enamorados. En Guía Infantil hemos decidido extenderla también a los niños para que ellos puedan expresar su amistad y amor y también recibirlo. Te proponemos muchas de recetas, manualidades y actividades que podéis hacer en casa con los niños para organizar el 14 de febrero una fiesta de San Valentín para niños. Luego los niños pueden regalar a sus seres más queridos aquello que hayan hecho con amor.

Recetas, actividades y manualidades en San Valentín con niños

Disfruta en familia de este día del amor y la amistad con todas estas propuestas para elaborar pequeños regalos y detalles caseros que harán mucha ilusión a quien los reciba. Y tú, también puedes crear muchos corazones para regalar a tus hijos. ¡Feliz Día de San Valentín! ¡Feliz 14 de febrero!

Y para que el amor siga por el aire... A continuación vamos a hablar sobre este valor que debe predominar en nuestro día a día. Cuando educamos desde el amor, nuestros hijos y nosotros mismos somos más felices.

9 formas de demostrarle amor a tus hijos el 14 de febrero

Cada día, independientemente de la fecha que sea y de que se celebre, debemos demostrarles a nuestros hijos amor, mucho amor. Si no es algo que hagas a menudo, ¡aprovecha el día de San Valentín para introducir esta rutina en tu vida! ¿Te apuntas? Si te faltan ideas, aquí te damos algunas ideas para manifestar cariño a tus hijos.

1. ¿Cada cuánto abrazas a tu hijo?
   Según los expertos dicen que el niño, para un correcto desarrollo, necesita doce abrazos al día. ¿Empezamos con el de buenos días o buenas noches?
2. El cariño, los abrazos y el contacto físico
   Los besos también son todo un clásico para expresar cariño y afecto. Y, quizás no lo sepas, tienen poderes mágicos: son capaces de reducir el dolor y el llanto de un niño.
3. Escuchándole
   Parar y no hacer nada más que escuchar es un gran gesto de amor que cada vez más estamos perdiendo. Pensamos siempre que lo nuestro es lo más importante y no empatizamos con nuestros pequeños y con sus cosas. ¡Cambiémoslo!
4. Yéndole a buscar un día al colegio
   El efecto sorpresa está muy relacionado con la alegría y con el amor. ¡Imagínate su cara cuando te vea aparecer entre las otras madres que se agolpan a la puerta de su colegio! O el día que te plantes en las gradas de su partido de fútbol o baloncesto. ¡Indescriptible!
5. Invitándole a que te ayude a preparar la comida
   A los niños les encanta introducirse en el mundo de los adultos y les fascina todo lo que esté relacionado con el ámbito de la comida. Deja que esta noche se conviertan en pequeños cocineros.
6. Jugando con ellos
   Muchas veces el día a día y el ritmo que llevamos no nos permite sacar tiempo para jugar con nuestro hijo. ¡Eso hay que cambiarlo ya! De lunes a viernes puede ser difícil, pero los sábados y los domingos y los festivos hay que encontrarlo.
7. Contándole un cuento
   ¿Y si ese momento de quedarse dormido mientras escucha de fondo tu voz? ¡Será un recuerdo que siempre permanecerá con él a lo largo de su vida!
8. Sonriéndole y mirándole a los ojos
   Muchas veces no hay que decir nada, simplemente hacer algún mini gesto como coger de la mano, lanzar una mirada cariñosa o esbozar una tímida sonrisa en la boca.
9. Regalándole una frase
   De vez en cuando, no está mal poner en palabras lo que el corazón no se atreve a decir. ¿Qué tal 'Eres especial, ¡no hay nadie como tú!'?

Cuentos, poesías y fábulas para hablar del amor con los niños

Los cuentos, las poesías y las fábulas ofrecen a los niños la posibilidad de descubrir nuevos mundos, de dejar volar su imaginación, de volverse personas más creativas, de aumentar su vocabulario... Para los padres también son una excelente herramienta educativa, ya que nos permiten hablar con nuestros hijos de valores universales y esenciales para el desarrollo de la persona, como es el caso del amor.

Hemos querido hacer una recopilación con los mejores cuentos, poesías y fábulas que hablan, de una manera u otra, del cariño y del afecto hacia los demás.

¿Sabías que existen distintos tipos de amor? ¡Seguro que sí! Vamos a conocer un poco más de ellos para que todos tengan cabida en nuestro día a día junto a nuestros niños.

Los tipos de amor que existen para un niño

Cuando tienes dos hijas y una de ellas te pregunta '¿A quién quieres más de las dos?', cualquiera se queda sin palabras, porque no sabe qué contestar ante dicha cuestión. A mí me ha pasado esto y, tras unos segundos en shock, recordé lo que una vez me dijo mi madre cuando volvía a casa de mis clases de natación: 'Hay muchos tipos de amor y todos son buenos'.

Y así es cómo les he intentado explicar a mis hijas que no se puede elegir entre un amor y otro y que, aunque el sentimiento está ahí siempre, se dan diferencias en función del momento en el que está uno. Por ejemplo, les expliqué que, cuando yo era pequeña, mi padre, mi madre, mis hermanos, mi tía y mis abuelos maternos eran mi mundo.

Según fui creciendo y entré en la pre-adolescencia/adolescencia empecé a desarrollar un gran afecto por mis amigas. Para mí ellas fueron muy importantes para superar algunos complejos típicos de esas edades. Lo que yo sentía hacia mi familia no había cambiado, pero notaba que se había reducido un poco en intensidad.

Luego, les seguí relatando, conocí a mi marido y todo volvió a descolocarse. Rápidamente él se situó en la pole position del amor, mis seres queridos subieron a segundo lugar y mis compis bajaron al tercero. Así se mantuvo durante bastante tiempo y pensé que así continuaría. ¡Qué equivocada estaba!

Porque entonces llegaron ellas y me di cuenta de que en mi corazón había hueco para más personas y, sobre todo, descubrí qué es el verdadero amor. Mi forma de relacionarme con mi pareja fue distinta, ¡gracias a él y con él, habíamos creado vida! A mi madre la empecé a ver de otra manera, ¡ahora yo ocupaba su lugar y quería seguir su ejemplo! Y me volví a acercar a mis amigas, ¡esas que también estaban experimentando lo mismo que yo: ser madre!

Y, lo más importante, aprendí que hay muchos tipos de amor, que todos ellos son diferentes y, a la vez, especiales, y que a todos ellos hay que cuidar y mimar a diario para que no terminen marchitándose. Y acabé diciéndolas que en el amor no se puede elegir y que a las dos las quise muchísimo desde que supe que estaban dentro de mí y que las amo y las amaré siempre.

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