Así son las rutinas de los bebés en las escuelas infantiles o guarderías

Seguro que en muchas ocasiones, has escuchado la importancia que supone que los niños tengan una serie de rutinas, ya que esto les ayuda en su desarrollo, además de sentirse más cómodos y relajados. Igual que en casa, en las escuelas infantiles y guarderías los bebés también tienen horarios específicos que les ayudan a anticiparse a los acontecimientos y estimulan su aprendizaje, porque así son las rutinas de los bebés en las escuelas infantiles o guarderías.

¿Cómo son las rutinas en las guarderías para los bebés?

Los centros de educación infantil y las guarderías están basadas en una serie de rutinas que los niños aprenderán y comprenderán muy rápido. No todas las guarderías están organizadas de la misma forma, ya que no hay una norma general. Serán los criterios de cada una de las educadoras de cada clase junto con la dirección y la ideología del centro.

Las rutinas con las que comenzamos el curso, irán cambiando poco a poco, según vayan creciendo los pequeños, sobre todo en el tipo de juegos y actividades a realizar. Aunque hay cosas que no cambiarán, como la hora de la siesta, la hora de la comida o la hora de juego. Estos horarios se deberán fijar en función de los niños que haya en una clase.

Es posible que un año, la mayoría de los niños, entren a las 8 de la mañana, y el año siguiente puede que entren después de las 9. Por lo tanto, deberemos conocer nuestra clase bien antes de marcar definitivamente los horarios. Además, los niños son los que nos marcarán los cambios si los necesitan. No todas las clases son iguales. Al igual que cada niño es totalmente diferente a los otros.

Otro dato curioso que puede cambiar el horario, es la ciudad donde estamos. En ciudades grandes, por las distancias y los trabajos, los niños suelen entrar antes a la guardería que por ejemplo en ciudades más pequeñas. Finalmente, podemos encontrar un gran número de organizaciones del aula diferentes, aunque todas siguen un horario con actividades que se repiten en todas las clases y en todos los centros.

Ejemplo práctico de rutina que llevan los bebés en una guardería

Este sería un horario para un día cualquiera de una guardería o escuela infantil, claro que todo puede cambiar dependiendo del país en el que vivas. Sin embargo, suele ser lo más parecida a esta rutina:

7:00 am – Dormir.

8:00 am – Juego libre o incluso dormir, en función del niño y de la edad.

9:30 am – Es muy buena hora para comenzar con la asamblea.

10:00 am – Tiempo libre. Aseo según las necesidades.

10:15 am – Actividades, juegos individuales.

10:45 am – Juego libre, aseo según las necesidades.

11:00 am – Actividades, juegos en grupo.

11:45 am – Juego libre. Se observa el comportamiento y la interacción de los niños entre ellos.

12:20 pm – Nos vamos a sentar para comer.

12:30 pm – A comer.

13:00 pm – Aseo.

13:10 pm – Siesta.

Beneficios que puede tener tu hijo si asiste a una guardería

• Socialización temprana. Los bebés comienzan a interactuar con otros niños desde una edad temprana, lo que les ayuda a desarrollar habilidades sociales como compartir, esperar turnos y cooperar. Estar en contacto regular con otros niños también les permite aprender a comunicarse de manera efectiva, incluso antes de dominar el lenguaje.
• Desarrollo cognitivo y emocional. Las guarderías están diseñadas para estimular el desarrollo cognitivo y emocional de los bebés. Las actividades diarias en la guardería están orientadas a fomentar la curiosidad, la creatividad y el aprendizaje, y los bebés participan en actividades estructuradas y libres que les permiten explorar su entorno y experimentar nuevos conceptos a través del juego. 
• Rutinas y estructura. La guardería brinda una rutina estructurada que es beneficiosa para los bebés porque ayuda a los bebés a sentirse seguros y saben qué esperar a lo largo del día. La repetición de actividades como la hora de la comida, la siesta y el juego organizado da una sensación de orden y contribuye al desarrollo de hábitos saludables.
• Fomento de la independencia. En la guardería, los bebés desarrollan habilidades de independencia a medida que exploran el mundo que los rodea sin la presencia de sus padres. Este entorno les permite aprender a resolver pequeños problemas por sí mismos y a sentirse cómodos en situaciones nuevas. La capacidad de ser independiente es crucial para el desarrollo de la autoconfianza y la autoestima.
• Apoyo a los padres. La guardería no solo beneficia a los bebés, sino también a sus padres. Proporciona una solución confiable para el cuidado infantil que les permite equilibrar sus responsabilidades laborales mientras saben que su hijo está en un entorno seguro. Además, muchos padres valoran el apoyo y la orientación que reciben de los cuidadores experimentados.

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