Valor de la paciencia para niños. Cómo aprender a ser pacientes

Tips para que padres e hijos aprendan a ser pacientes. Cómo y por qué inculcar la paciencia en los hijos

Vilma Medina, Periodista, MA
En este artículo
  1. 9 formas para inculcar el valor de la paciencia en la familia
  2. Cocinar es una actividad que enseña a los niños a ser pacientes
  3. 4 grandes beneficios que aporta la paciencia para padres e hijos
  4. Cuentos para niños que tratan del valor de la paciencia

La paciencia es uno de los aprendizajes que más cuesta enseñar a los hijos, y es que además de ser impacientes por naturaleza y querer algo de forma inmediata, los niños no entienden el concepto del tiempo. Para ellos cinco minutos, una hora o un rato, es un concepto abstracto que no alcanzan a comprender, por ello insisten una y otra vez hasta que consiguen aquello que están reclamando. De esta manera, y valga la redundancia, para educar en la paciencia, los padres tenemos que tener paciencia.

9 formas para inculcar el valor de la paciencia en la familia

el valor de la paciencia en niños

El grado de madurez del niño es importante a la hora de lograr que sean pacientes. A un niño en la etapa de educación infantil, con un alto nivel de egoísmo y la necesidad de que toda la atención se centre en él, le costará más. En cualquier caso, es importante desde las primeras etapas y con cariño enseñar el valor de la paciencia a los niños. Aquí tienes algunas pautas y métodos educativos que te ayudará en esta tarea:

1. El ejemplo de los padres es fundamental
Si perdemos los nervios ante un pequeño atasco, expresamos lo mucho que nos molesta esperar la fila en un comercio o interrumpimos a los demás cuando hablan, no podremos esperar que nuestros hijos se comporten con paciencia en situaciones del día a día. Por ello, tu ejemplo es el método más importante para que tus hijos aprendan a ser pacientes.

2. Enseñar a los niños a esperar sin perder la paciencia
Cuando el niño nos interrumpe mientras hablamos o espera que paremos cualquier actividad para atenderle, debemos mantener la calma y una vez hemos terminado lo que hacemos, dialogar con él para que entienda por qué y en qué situaciones ha de esperar. Si en este momento, le gritamos o regañamos y después no intentamos aclarar por qué ha de ser paciente, su conducta difícilmente podrá cambiar.

3. Entrenar la paciencia con juegos infantiles
Los juegos de mesa como los puzzles y los crucigramas, o los deportes de equipo, ayudarán a los niños a entender que ha de esperar su turno o que tiene un papel dentro del grupo y ha de esperar al momento adecuado para ponerlo en práctica.

4. Invitar a los niños a actividades que necesitan de paciencia
Pueden practicar la paciencia, por ejemplo, elaborando una receta de cocina. Invita a tus hijos a cocinar, a preparar un bizcocho o lo que sea que necesite tiempo para cocer, hornear, etc. Además, los niños se divirtirán muchísimo.

Cocinar es una actividad que enseña a los niños a ser pacientes

niños aprenden a tener paciencia

5. No atender inmediatamente a cada vez que tu hijo te llama
Para enseñarle a ser paciente podemos comenzar por esperar durante un instante antes de resolver un problema, siempre que no sea una urgencia, para que entienda que no acudiremos corriendo cada vez que llame.

6. Aprovechar determinadas situaciones para que los niños comprendan el tiempo
Si queremos que el niño espere, es más beneficioso utilizar ejemplos concretos y no abstractos. Es decir, evita decir 'dentro de cinco minutos' y utiliza 'cuando recojas los juguetes' o 'cuando terminemos de cenar' para que pueda comprender el tiempo que habrá que esperar. Eso se puede aplicar en la espera de un tren, un avión, en un atasco, en la cola del supermercado, etc.

7. Crear alternativas a los niños durante un tiempo de espera
Si sabemos que nos tocará esperar en lugares como la consulta del médico o un viaje en coche, llevemos juegos, cuentos o actividades para que al niño no se le haga tan larga la espera

8. Entrenar la paciencia con juegos infantiles
Los juegos de mesa con varios participantes o deportes de equipo, le ayudarán a entender que ha de esperar su turno o que tiene un papel dentro del grupo y ha de esperar al momento adecuado para ponerlo en práctica.

9. Practicar actividades que exigen relajación y concentración
Un ejemplo es la meditación, una actividad que nos enseña a respirar, a calmar la mente y a estar en paz. El yoga y el mindfulness son muy favorables cuando se practica en familia. Ayuda a que tengan más paciencia.

4 grandes beneficios que aporta la paciencia para padres e hijos

beneficios de la paciencia

La paciencia es una habilidad entrañable y cuánto más la practiquemos más beneficios aportaremos al nuestro día a día. Aquí te contamos las ventajas de aprender a tener paciencia y de practicarla con los niños, en familia:

1. La paciencia favorece a la salud mental
Personas pacientes presentan menos estrés, ansiedades, depresiones y otras emociones negativas porque saben lidiar con la espera.

2. La paciencia mejora la calidad de vida
Estudios demuestran que ser paciente es bueno para la salud. Personas pacientes tienen menos problemas de salud, menos dolores de cabeza, menos enfermedades de la piel, del pulmón y del sistema digestivo. Además, presentan mejor hábito de sueño.

3. La paciencia ayuda en la concentración
Las personas pacientes consiguen mantener el focus en sus objetivos y metas, y pueden tomar mejores decisiones de una forma más racional. Por ello, se muestran más satisfechos.

4. Ser paciente genera relajación y tranquilidad
La paciencia mejora nuestra relación con nosotros mismos y con los demás. Mejora las relaciones entre padres e hijos, con los amigos y demás personas. Es un valor que hace mucho más tranquilos y relajados.

Cuentos para niños que tratan del valor de la paciencia

Razones por las que niños y padres deben practicar la paciencia

Personas pacientes poseen algunas características positivas, y adquieren otras habilidades y virtudes que favorecen y fortalecen a su bienestar:

1. Son deliberativas, reflexivas y analíticas
Personas pacientes suelen no tomar decisiones a la carrera, prefieren analizan antes de actuar, es decir, prefieren pensar detenidamente antes de decidir. Prefieren analizar los peligros y sopesar los diferentes impactos antes de dar el siguiente paso.

2. Son personas que saben escuchar
Personas pacientes saben, a través de la escucha, valorar lo que el otro está diciendo, incentiva a los demás a hablar y expresarse. Además, aprenden más.

3. Son personas que saben controlar sus emociones
La práctica de la paciencia enseña a las personas a tener más control sobre sus actitudes. Disciplinan a sí mismas en base a la razón y no a la emoción.

4. Son personas que saben tolerar, comprender y respetar
La paciencia evita a las personas a emitir juicios sobre las demás. Son tolerantes con las imperfecciones de las personas y son comprensivas y respetuosas cuando cometen errores. Son personas altamente comprensivas con los demás.

Puedes leer más artículos similares a Valor de la paciencia para niños. Cómo aprender a ser pacientes, en la categoría de Valores en Guiainfantil.com.

Publicado:
Actualizado: