Los tres cerditos. Capítulo 17. Cuento para niños
Cansado de soplar y sintiéndose muy decepcionado y frustrado por no haber conseguido derrumbar la casa de ladrillo del tercer cerdito, el lobo se enfadó muchísimo, pero no desanimó. Miró a la chimenea de la casa y ¡tubo una gran idea!
Publicado:
Actualizado: