En Halloween no todos los disfraces tienen que dar miedo, hoy en día te puedes disfrazar prácticamente de cualquier cosa. Da rienda suelta a tu imaginación y disfrázate de un bonito oso panda. Esta máscara puedes realizarla con goma eva, purpurina plateada y trozos de tela negros.
Puedes combinar esta tenebrosa máscara con un gorro de bruja o brujo y vestimenta color negro. Un murciélago hecho de papel con dos agujeros para los ojos y un palito pegado en una de sus alitas, serán suficientes para hacer una máscara original para los niños en el día de Halloween.
Para realizar esta máscara, traza la silueta del rostro de una cebra y recórtala incluyendo dos agujeros para los ojos, después dibuja rayas con color negro de diferente tamaño, recorta dos óvalos de goma eva rosa para las orejas y por último haz dos agujeros a ambos lados de los ojos para colocar un trozo de cordón elástico.
El famoso personaje de la novela de Mary Shelley, cobra vida gracias a esta divertida máscara. Frankenstein es un personaje clásico de Halloween que a los niños les encanta. Motiva a tus niños a hacer esta tenebrosa máscara y completa su disfraz con una camiseta vieja y pantalones rotos.
¿A quién no le gustaría convertirse en superhéroe por un día? Muchos niños tienen esa ilusión y para Halloween es una idea genial para un disfraz. En esta ocasión te mostramos este sencillo antifaz para que los pequeños puedan ser los héroes de la noche de brujas.
Con cartón, purpurina y algunas plumas puedes realizar un antifaz para los niños. ¿Qué te parecería un fantasma con disfraz de época? Los niños pueden vestirse con trajes antiguos y este bonito antifaz. ¡Una idea muy original para disfrazarse en Halloween!
Si quieres un disfraz de espanto, te aconsejamos realizar estas máscaras de fantasma. Una manualidad muy sencilla de hacer, para la cual solo necesitarás un palito de madera y cartulina naranja. ¿Qué te parecen? ¿Bonitas no?
Si tu hijo es fanático de la saga Harry Potter, esta máscara es ideal para complementar su disfraz. Simula los lentes de Harry recortando dos círculos grandes de cartulina negra y un pequeño rayito de cartulina roja para simular su cicatriz, y ¡abracadabra! ya tienes una divertida máscara para Halloween.