La mejor calefacción para bebés. El calor y el frío en recién nacidos

Durante los primeros meses, el bebé pasa mucho tiempo en la casa, de ahí que los padres quieran crear un ambiente seguro para su niño/a. Aunque no anda aún, tapan todos los enchufes y quitan las cosas que puedan estar a su alcance, pero no es lo único: están muy pendientes de la temperatura a la que debe estar el hogar y dudan sobre cuál será la mejor calefacción para su bebé. ¡Te ayudamos!

La temperatura ambiental adecuada para un bebé

Cuando nace un bebé, una de las tantas preocupaciones o dudas de los padres es la temperatura corporal del mismo, o sea, si siente frío o no, ya que sobre ese tema también hay muchos mitos. Claro que es necesario e importante mantener una temperatura corporal adecuada en el niño para evitar la hipotermia (disminución de la temperatura del cuerpo por debajo de lo normal), sobretodo en los recién nacidos, de ahí que seguro que hayas oído (y es cierto) que debemos ponerles gorrito, patucos y manoplas al llegar a este mundo porque por ahí se escapa el calor.

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Pero, cuidado, porque tampoco es bueno exagerar en cuanto a mantenerlos calientes y sobreabrigados, ya que esto es una de las causas o riesgos del síndrome de muerte súbita, que lamentablemente se puede producir en un bebé sano menor de 12 meses.

Y cuando llegamos a casa con el bebé, ¿qué hacemos? Debemos ofrecerle el mejor ambiente, donde se sienta agradable, cómodo y feliz, pero también que nos garantice su salud. Necesitamos crear una temperatura ambiental adecuada, donde no haya riesgos de una hipotermia por bajas temperaturas o hipertermia por exceso de calor, y que esto nos lleve a alterar su salud.

¿Cuál es la temperatura adecuada y con qué calefacción lograrla? Por lo general, un bebé y más si es prematuro, va a pasar sus primeros meses (alrededor de tres meses) metido en su habitación, durmiendo o en brazos de su madre.

Es necesario que la calefacción de la habitación sea la más adecuada, y se estima que la temperatura debe estar entre 21 y 24 grados durante el día (21 grados es lo ideal), considerando que está fuera de su cuna más tiempo y más activo. Durante la noche debe ser entre 18 y 20 grados, ya que durante este momento del día, por lo general, está más abrigado, por la pijama, la manta o cobija y eso hará que su propio cuerpo genere más calor. Y en cuanto a la humedad del ambiente donde se encuentra el bebé, se considera que la misma debe estar entre el 50 al 75%.

¿Cuál es la mejor calefacción para la habitación de un bebé?

Es importante para la comodidad y la salud del bebé mantener un ambiente con una temperatura y humedad adecuada y es responsabilidad de nosotros los padres adquirir la calefacción más adecuada y con las mayores ventajas para que eso sea posible. Aquí te hemos hecho un análisis de cada una de ellas.

- Calefacción o radiador eléctrico
Es excelente para el ambiente del bebé, pero al instalarlo se debe tomar en cuenta su ubicación, ya que al alcance del bebé, puede producir una quemadura leve. La temperatura se controla a través de un termostato que consume muy poca energía y distribuye el calor de forma homogénea por todo el ambiente. Su instalación es muy sencilla y no necesita de mantenimiento constante.

- Calefacción por caldera
También es excelente para la casa donde se encuentre un bebé. No tiene riesgo de quemaduras, consume poca energía y el calor se distribuye por la casa a través de radiadores. No libera gases tóxicos, pero su costo de mantenimiento se considera alto.

- Termoventiladores
De fácil instalación y uno de los más económicos, pero es recomendado para ambientes pequeños, como para calentar el baño antes de bañar al bebé o la habitación antes de dormir. Por su tamaño, es portátil y de fácil traslado, pero tiene baja potencia térmica y un elevado costo eléctrico, por lo que solo debe usarse para momentos puntuales. En cuanto a seguridad es excelente, no provoca quemaduras.

- Calefacción infrarroja
Este tipo de calefacción distribuye el calor a través de ondas que generan calor sobre las superficies, no calentando el aire, sino los objetos que lo rodean, siendo excelente para bebés con enfermedades respiratorias. Otras ventajas: es silencioso, no emite olores desagradables y reduce el consumo eléctrico en un 50% en comparación con los calentadores eléctricos. ¿Sabías que, a pesar de todas estas ventajas, es el menos conocido?

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