Los niños: el despertador de los domingos

Lunes, martes, miércoles,... ¡y domingo! ¿Dónde quedan aquellos fines de semana en los que la pareja antes de convertirse en papá y mamá podía dormir hasta tarde porque no sonaba el despertador para ir a trabajar y no había prisa para ir a ningún lugar? Ahora mis pequeñas alondras madrugadoras, vienen a tomar el relevo de nuestro despertador.

Domingo con los niños

¡Qué maravillosos son los domingos para los niños! Por un día, ellos son los encargados de merodear por la casa y despertar ruidosamente a papá y a mamá, saltar a la cama grande y preguntar inoportunamente "¿mamá estás despierta?" Ahora sí, hijo, responderemos. Remolonear en la cama, quizás sí podremos, pero lo que es dormir para recuperar el sueño perdido de los madrugones semanales, eso quizás tenga que esperar a cuando sean más mayores.

Mientras estamos todavía semiinconscientes, nuestro hijo ya comienza a preguntarnos lleno de energía y dando brincos, adónde iremos hoy, cuándo vamos a desayunar, y a decirnos: quiero hacer pis, no tengo las zapatillas..., una multitud de escusas para obtener de nosotros la inevitable respuesta de ponernos en órbita para comenzar el día. Pese a estos inconvenientes, los domingos pueden tener un sabor muy especial. Es un día para que nuestros hijos gocen de algunos privilegios. Tener la oportunidad de poder meterse en la cama de sus padres, recibir besos y cosquillas, tirar de la sábana, acoplarse bajo el ala de papá o dar puntapiés haciéndose hueco entre los dos, es algo que casi todos hemos hecho.

Yo recuerdo con enorme cariño cómo iba a la cama gigante de mis padres y, ellos, sacaban la caja de dulces de debajo, para invitarme a uno, aun poniéndoles la cama perdida. ¡Mis domingos sabían a polvorón de almendras y a besos de ajonjolí! Resignémonos, el reloj biológico de nuestro hijo no discrimina días festivos de laborables, así que disfrutemos de nuestros pequeños terremotos…, siempre podremos recuperar el sueño en la siesta... o cuando sean más mayores. ¡Papá, mamá: a despertarse que ya es domingo!

Patro Gabaldón. Redactora de GuiaInfantil.com

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