Prueba de monitores en el embarazo - ¿Cómo sé que mi parto se acerca?

Hacia el final del embarazo, los médicos citan a la futura mamá para realizarse la prueba de monitores. En mi primer embarazo me quedé extrañada cuando me hablaron de la prueba, no sabía bien en qué consistía. Sin embargo, la experiencia es un grado y al final te acabas acostumbrando a la terminología del embarazo: que si test de O'Sullivan, que si la prueba del exudado, la fpp, el tapón mucoso... Al principio abruma pero después te haces con ello. Es como ser madre primeriza y escuchar a otra mamá experimentada hablar de medicamentos infantiles... ¡parecen farmacéuticas! Y al final, tú te conviertes en otra más.

Qué es la monitorización fetal antes y durante el parto

Ahora tengo muy claro qué es y en qué consiste la prueba de la monitorización fetal. El parto está cerca y en las últimas semanas te citan para comprobar el estado de salud del bebé y si se están desencadenando ya contracciones. Durante la prueba de monitores habrás de pasar un rato tumbada cómodamente en una camilla.

Ahí te colocarán por el abdomen unas correas que disponen de unos electrodos, para recoger una serie de datos a través de un monitor o cardiotocógrafo. La función de este aparato es medir el latido cardíaco fetal, tanto es así, que podrás escuchar los latidos del corazón del bebé mientras te realizan la prueba. Además el monitor recoge las contracciones que se producen en el útero. 

Toda la información va saliendo por una pantalla situada junto a la camilla y se irán grabando en una banda de papel. Es posible que durante las últimas semanas o días antes del parto, te citen varias veces para realizar esta prueba. Cuando ingreses en el hospital porque el trabajo de parto ya se ha iniciado, volverán a 'enchufarte' a la máquina.

De esta manera podrán comprobar todo: la dilatación, el estado de las contracciones y el latido fetal. En algunos partos o según la clínica que te trate, el aparato te acompañará durante todo el parto. Se utiliza principalmente para detectar un posible caso de sufrimiento fetal, para medir las contracciones y conocer el ritmo y la intensidad de éstas.

Importancia de la monitorización fetal para saber que el parto se acerca

Si te aplican la epidural, puede que no notes cuándo llega la contracción por lo que el aparato ayudará a la matrona o ginecólogo para saber cuándo ha de indicarte que has de realizar un pujo. Además, durante el parto podrían poner uno de esos electrodos a nivel interno, si la dilatación es la suficiente y ya has roto aguas, pasándolo por el cuello del útero, hasta colocarlo en la cabeza del bebé.

La monitorización fetal se ha convertido en una herramienta esencial en el manejo moderno del trabajo de parto, permitiendo a los médico mantener un control riguroso y continuo sobre el bienestar del bebé durante este proceso. La información que proporciona el cardiotocógrafo es vital no solo para detectar posibles complicaciones, sino también para guiar las decisiones médicas durante el parto.

Esta tecnología, si bien puede parecer intimidante al principio, es una aliada en el objetivo de asegurar que el proceso de nacimiento se desarrolle de la manera más segura posible tanto para ti como para el bebé. La monitorización continua permite a los médicos y enfermeras responder rápidamente si los patrones del ritmo cardíaco fetal sugieren cualquier tipo de anomalía.

En mi caso hubo sospecha de que los latidos del corazón del bebé mostraban signos de estrés, como variaciones anormales en la frecuencia o ausencia de la variabilidad normal, pero el equipo médico lo descartó después de tomar medidas correctivas inmediatas. A mí me hicieron cambiar de posición, me pusieron oxígeno y gracias a la mejoría se evitó una cesárea.

¿Cómo funciona a detalle el monitor en la recta final del embarazo?

Además de monitorear el ritmo cardíaco fetal, la monitorización fetal también proporciona información detallada sobre el patrón de las contracciones uterinas. Esto es muy útil para asegurar que las contracciones sean efectivas para avanzar el proceso de dilatación y, eventualmente, el nacimiento de tu bebé. ¿Te imaginas cómo te beneficia esta monitorización?

La capacidad de visualizar tanto las contracciones como la respuesta fetal en tiempo real ayudan a evaluar la progresión del trabajo de parto y hacer ajustes si es necesario. Para nosotras las madres, conocer el funcionamiento de esta tecnología nos proporciona una mayor sensación de seguridad y control durante el parto, ¿no te parece?

Saber que cada latido del corazón de tu bebé está siendo cuidadosamente monitoreado te ayuda a disminuir la ansiedad y te permite concentrarte en el trabajo de parto con una mayor paz mental, así que la experiencia de usar la monitorización fetal también refuerza la importancia de la atención prenatal y la preparación para el parto.

Lo que queremos es que te familiarices con estas herramientas y procesos, porque así te sentirás más empoderada y participativa en tu propia experiencia de parto, contribuyendo a que este proceso sea mucho más positivo y satisfactorio tanto para ti como para tu bebé. Disfruta mucho la recta final de tu embarazo y no te asustes por la monitorización fetal.

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