La dermatitis atópica y la obesidad infantil

Aún no se conocen a ciencia cierta cuáles son las causas que pueden desencadenar la dermatitis atópica en los niños, y por qué aparecen los brotes.

En ocasiones, se ha afirmado que puede obedecer a una manifestación hereditaria, porque generalmente suele haber otros miembros en la propia familia que también pueden presentar el estado atópico con distintas afecciones. Así, mientras uno puede padecer asma, otro puede sufrir dermatitis atópica. Incluso una misma persona puede tener a la vez o en distintos periodos de su vida, diferentes afecciones.

La relación de la dermatitis atópica y la obesidad infantil

La dermatitis atópica es una enfermedad crónica de la piel que está aumentando entre la población infantil y numerosas investigaciones se están empleando a fondo en los últimos años para determinar cuáles son sus causas para tratarlas. Se ha discutido mucho sobre el papel de ciertos alimentos como uno de los factores desencadenantes de la dermatitis atópica. Los que más se suelen nombrar son la leche, los huevos o el pescado. 

Sin embargo, un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad Murcia ha revelado que no existe relación entre la dermatitis atópica infantil y el consumo de diversos alimentos tales como lácteos o frutos secos. En cambio, el grupo de Pediatría de la Universidad de Murcia si ha encontrado una relación entre la alimentación y la relación que esta tiene sobre la dermatitis atópica y la obesidad infantil. La conclusión principal del estudio indica que la obesidad infantil supone un factor de riesgo relacionado con la dermatitis atópica infantil, lo que nos hace pensar que realmente es cierta la máxima de que somos lo que comemos, ya que las cifras de niños obesos se están disparando en los últimos años.   

La dermatitis atópica es una enfermedad crónica de la piel, que se ha incrementado sustancialmente en las últimas décadas, en la que el sistema inmune responde de una manera exagerada a la exposición a algunos alérgenos. La dermatitis atópica es más frecuente en la infancia, y su prevalencia y severidad normalmente decrecen con la edad.

Las zonas afectadas son la cara, el cuello y la parte superior del tronco. También puede afectar los pliegues de los codos y de las rodillas. Los síntomas que produce la dermatitis atópica en la piel son picor intenso, ampollas que supuran y forman costras, erupción cutánea, áreas de la piel secas y escoriación producto del rascado. Los corticoides asociados al antibiótico, los antihistamínicos y las cremas específicas para pieles atópicas que tienen la función de hidratar.

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