12 actividades de verano fuera de los libros para que los niños aprendan

En Guiainfantil.com sabemos que las vacaciones de verano son para descansar, para pasárselo en grande y también para repasar lo aprendido durante todo el curso, incluido los valores en los que tanto intentamos centrarnos padres y maestros. Y es que lo más importante no es solo que los alumnos aprendan mucho de matemáticas o de inglés, sino que sean buenas personas y en eso seguro que todos los niños y niñas sacan matrícula de honor. No te pierdas las actividades de verano fuera de los libros que los niños tienen que completar estas vacaciones.

Tareas de verano: ideas para aprender valores y divertirse

No es la primera vez que te hablo del colegio de mi hijo y de mi hija... Es un colegio de barrio de toda la vida en el que tienen ideas tan maravillosas como que los viernes por la tarde se hacen talleres y que, durante los primeros años de primaria, a los exámenes se le llama 'fichas silenciosas' para que evitar que se pongan nerviosos. El caso es que cada vez que vienen las vacaciones de Semana Santa, Navidad o verano, los profesores les ponen unas actividades de lo más especiales.

Por supuesto que cuando se trata de vacaciones largas como las estivales, les proponen que repasen las tablas de multiplicar, lean mucho, escriban textos cortos, hagan dictados y vean películas, dibujos y series en inglés. Pero, a todo esto, se une una hoja a parte que dice así: ¡Ideas para el verano! Con ese título a ningún niño se le escapa que ya tiene en la palma de su mano las divertidas ideas fuera de los libros que sus profesores han estado pensando para ellos con la mayor de las ilusiones.

Actividades de verano para que los niños aprendan

Yo te comparto aquí unas cuantas actividades infantiles y luego ya tú, si te parece bien, añades alguna más que se te ocurran y eliges la que vais hacer hoy, mañana, pasado... ¡Lo vais a pasar en grande! Como vas a ver, se trata de juegos y actividades para disfrutar de unos merecidos días de descanso pero también para aprender cosas, conocer la importancia de valores como la amistad y el compañerismo y además para no olvidar que la familia es lo más importante de todo.

1. Ver una película en familia
¿Ver una película está en la lista de los deberes de verano? ¡Pues claro que sí! La idea es elegirla entre todos, verla juntos y luego hacer un debate sobre qué nos ha parecido, si nos ha gustado, qué hemos aprendido... Podemos incluso terminar con un bonito dibujo. ¿Tú también crees que se trata de una actividad estupenda para hacer como mínimo dos veces a la semana?

2. Lo que hemos aprendido del reencuentro con nuestros seres queridos
Seguro que tú también aprovechas las vacaciones de verano o de cualquier otra época para visitar a familiares y amigos que no tienes la oportunidad de ver muy a menudo. Pues esta es otra tarea casera ideal para hacer con los niños; una vez se ha terminado el día en familia, les preguntaremos cómo se han sentido, si se llevan alguna enseñanza y si entienden por qué estas reuniones son tan valiosas.

Los niños tienen que aprender de bien pequeños que la familia, tanto la que nos viene dada, como la que se escoge (los amigos) se debe cuidar mucho.

3. Un repaso por las experiencias vividas en casa
Te sientas una tarde o una mañana en casa y les dices a tu hijos que los deberes de ese día serán comentar en voz alta o escribir en una hoja las vivencias que recuerdan con más cariño del tiempo en casa y en la escuela durante este año. Para que les sea más fácil, les podemos decir que, por ejemplo, hagan un dibujo de sus mejores amigos, describan lo que más les ha gustado del curso escolar, las cosas que sí harían de nuevo, aquello con lo que se han sentido incómodos o tristes y cuáles son sus deseos para los próximos meses.

No dudes en hacer este ejercicio tú también, te servirá como terapia para valorar las pequeñas cosas y alejar el estrés del día a día.

4. ¡Vamos de compras!
Entre las cosas que le toca repasar a mi hijo este verano están las monedas, por ello, para que sea ameno, interesante y práctico, los profesores nos han dicho que venga con nosotros hacer la compra algún día. Así podrá fijarse en cuánto cuestan los productos y cuánto dinero tienen que devolver en cada pago. No hace falta que toquen el dinero, con que se fije será suficiente.

A mí se me antoja que también es un ejercicio muy útil para que vean que todo cuesta dinero y que no pueden pedir siempre que les compremos todos los caprichos, ¡me he convertido en una madre de lo más apañada!

5. Aprender y cantar muchas veces la canción del verano
¡Qué sería del verano sin las canciones! Por supuesto que me refiero a la música pegadiza que suele sonar en todas las radios pero que tiene una letra bonita que sí pueden escuchar los niños, ya sabes que muchas canciones no son para su edad, así que, nuestra recomendación es que elijas una o dos y que la pongas en casa de vez en cuando para cantarla y bailarla, ¡podéis hacer incluso una coreografía!

No podemos olvidar que la estimulación musical, desde muy tempranas de edades, tiene muchos beneficios para los niños. Tal y como se señala en el 'La música infantil como estrategia pedagógica' de Berly Yasmin Guerrero para la Corporación universitaria Minuto de Dios, la música es una herramienta que propicia la construcción del ambiente ideal para que los niños aprendan. No podemos pasar por alto que gracias a las canciones infantiles, los niños se relajan y se sienten más alegres, lo que mejora su disposición al aprendizaje.

6. Leer un cuento
Me acuerdo cuando era pequeña y leía libros en las vacaciones, yo lo llamaba los libros del verano. Dile a tus hijos que lean ellos solos y que lean con mamá y papá, no solo mejorarán en la lectoescritura sino que además comprenderán que la lectura es el mejor de los pasatiempos.

Deberes fuera de los libros para las vacaciones de verano

Seguro que ya tienes unas ganas locas de ponerte a hacer con tus hijos estas actividades de repaso, ¡yo también estoy deseando hacerlas con mis niños! Aquí tienes otras ideas idóneas para completar en verano.

7. Fabricar un helado casero o una horchata
Si hace calor haremos nuestro propio helado o una refrescante horchata y si hace frío podemos preparar un bizcocho o unas magdalenas. Deja que tus niños entren en la cocina, acabará todo patas arriba pero será una gran lección que recordarán siempre.

8. ¡Una fiesta de agua!
Globos, pistolas de agua, un barreño y que cada uno se ponga las chanclas y el bañador. Las fiestas a base de agua son de las cosas que más le gustan a los niños, no te olvides de incluirla en la lista de cosas para repasar estas vacaciones.

9. Hacer nuestro propio abanico
Pues eso, que si hace calor hay que buscarse las mañas para contrarrestarlo, ¿qué tal un abanico? Uno de papel o incluso uno plegable, solo tienes que echarle un poco de imaginación y pasaréis una tarde en familia muy entretenida.

10. Volar una cometa
¿Has volado alguna vez una cometa con los niños? Les encanta ver cómo se mueve entre las nubes. No te será difícil encontrar una en las tiendas pero, si lo vuestro son las manualidades, no dudes en ponerte manos a la obra y diseñar vuestra propia cometa.

11. Un chapuzón o un paseo por la montaña
Si tienes la playa cerca, un chapuzón; si este año vais a ir a la montaña, pues un largo paseo. Lo que se pueda y lo que más os guste pero que sea en familia y contando a los niños curiosidades de los ríos o los animales que viven en el mar.

12. Hacer un castillo de arena en la playa o en el parque
Ya para cerrar nuestro listado de actividades de verano fuera de los libros tenemos... ¡un castillo de arena! Si este año no podéis pisar la playa, no pasa nada de nada, el castillo se puede hacer con la arena del parque, ¡a los niños les va a encantar la idea!

Llega el verano y ¡ahora toca jugar!

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