¡Bullying a la vista! - Mi hijo es acosado en la escuela, ¿qué hago?
Cuando el bullying es en la escuela, los padres se sienten perdidos al no saber actuar, aquí lo que puedes hacer para ayudar a tu hijo
- ¿Qué hago si mi hijo es víctima de bullying en la escuela?
- Cómo tratar el tema del acoso escolar hacia tu hijo
- Así se debe actuar cuando un niño es víctima de bullying en la escuela
¡Oh, no! ¡Bullying a la vista! 'Mi hijo es acosado en la escuela, ¿qué hago?', es la pregunta de muchos padres, ya que el acoso escolar, o bullying, es un comportamiento repetitivo y negativo dirigido hacia un estudiante o grupo de estudiantes con la finalidad de causarles dolor y sufrimiento.
Algunas de las prácticas relacionadas con el bullying incluyen el acoso verbal o físico, el ciberacoso y el acoso social. Esta situación tiene graves consecuencias en el bienestar físico y emocional de las víctimas, por lo que deben ser tratadas y minimizadas tan pronto como se detecten.
¿Qué hago si mi hijo es víctima de bullying en la escuela?
Los papás somos los expertos en nuestros hijos y, por ende, los más capacitados a la hora de ver cambios en ellos que puedan indicar que algo va mal. La observación constante del comportamiento de nuestros hijos nos va a alertar de cualquier situación que no sea favorable para su crecimiento y desarrollo, y nuestra obligación es intervenir tan pronto como sea posible si notamos que hay bullying.
Así pues, debemos tener muy presente que cualquier cambio repentino en la conducta de nuestros hijos puede ser un claro indicio de una situación perjudicial que debe ser tratada en familia y solucionada, incluso con la ayuda de especialistas. Los cambios más frecuentes que podemos observar en niños que están siendo víctimas de bullying pueden darse tanto a nivel físico como psicológico.
Cuando el niño empiece a mostrar reticencia a la hora de ir al colegio debemos preguntarle sobre los motivos, ya que el bullying puede ser uno de ellos. La falta de amigos, los cambios de humor, la irritabilidad en casa o la apatía son indicios que también se asocian con estas situaciones extremas a las que está sometido el niño.
Así mismo, los dolores de estómago, morderse las uñas y dificultad para conciliar el sueño son otros síntomas que deben alertarnos de que algo no está funcionando como debería. La ansiedad y la depresión infantil pueden estar causadas por motivos muy diversos, pero si podemos asociarlas al entorno educativo, la causa más probable de ellas sea un abuso por parte de un compañero.
Por último, también debe alertarnos un cambio en el rendimiento escolar, pues la situación que puede estar viviendo nuestro hijo le dificultará concentrarse en clase o detonar en estrés. Sea como sea, cualquier variación en el comportamiento infantil debe ser considerada una señal de alarma.
Cómo tratar el tema del acoso escolar hacia tu hijo
Tan pronto como nos demos cuenta de una alteración en el comportamiento de nuestros hijos, debemos hablar con ellos. Es fundamental hacerlo en un entorno de confianza, empatía y, sobre todo, de serenidad. Debemos evitar perder los nervios o presionar en exceso a nuestro hijo. Ser sinceros acerca de lo que hemos observado nos ayudará a que el niño se abra y nos explique, con detalle, qué situación le está causando malestar.
En el caso de que podamos vincular este cambio de comportamiento con una situación de acoso, lo primero que debemos hacer es validar sus emociones y dejarle muy claro que esta situación no es su culpa. Los niños que son víctimas de estas prácticas tienen tendencia a autoinculparse de todo cuanto les sucede, algo que deteriora su autoestima.
Otro paso que debemos dar es contactar con la escuela y hacerles conocedores de esta situación. Es posible que la escuela no haya detectado ciertos comportamientos, pues los niños víctimas de acoso escolar suelen esconder esta situación dado el miedo y la inseguridad que les causa.
La escuela, en este caso, debe hacerle saber al niño que abusa de que este comportamiento no es tolerable y, de repetirse, habrá consecuencias. Cada escuela debe adoptar un protocolo de bullying en el que haya una graduación de consecuencias que alienten a los niños a cesar en estas actitudes.
Así se debe actuar cuando un niño es víctima de bullying en la escuela
Para empezar lo que nunca es aconsejable es que los padres intentemos solucionar el problema por nosotros mismos. Por un lado, pues, es necesario que trabajemos las habilidades sociales con nuestro hijo para que este se fortalezca y mejore su autoestima; de ser necesario quizá pueda encontrar otro grupo de amigos que le ayude.
Por otro lado, nunca debemos enfrentarnos directamente al niño que acosa ni a sus padres, ya que podría conllevarnos problemas legales. Así mismo, los padres suelen tener una actitud que favorece el comportamiento abusivo de sus hijos en el colegio, por lo que no podemos esperar empatía ni soluciones por su parte, así que es mejor evitarlo.
En el último caso, si vemos que la situación no se soluciona, podemos optar por buscar ayuda legal y apoyo psicológico de inmediato para el niño. El acoso escolar es una de las causas de ansiedad y de depresión infantil. Estas actuaciones abusivas se han incrementado mucho en los últimos años, tanto que son varios los protocolos que las escuelas y centros educativos deben poner en marcha tan pronto como se detecten estas situaciones.
Ayudar a la víctima y alejarla del abusador es el primer paso para mejorar la calidad de vida del niño que sufre el acoso. Paralelamente, hay muchas otras acciones que se deben llevar a cabo para garantizar su seguridad y bienestar. En cuanto detectes que tu hijo está pasando por esta situación hable con sus profesores y busquen detener el acoso cuanto antes.
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Bibliografía
- Castillo-Pulido, L.E. (2011) El acoso escolar. De las causas, origen y manifestaciones a la pregunta por el sentido que le otorgan los actores. Magis. Revista Internacional de Investigación en Educación, Vol. 4, No. 8. Pontificia Universidad Javeriana (ed.), Colombia, pp. 415-428 Disponible en: https://www.redalyc.org/pdf/2810/281021722009.pdf