Conecta con tu hijo cuidando juntos de una mascota o planta

Actividades tan del día a día como puedan ser cuidar de la mascota o de una planta pueden ser de lo más beneficiosas para conectar emocionalmente con nuestros hijos. Y es que, además de fomentar su sentido de la responsabilidad, estaremos favoreciendo aspectos positivos como la mejora su autoestima y la liberación de endorfinas. Mariana Capurro, psicóloga, te cuenta las ventajas de que tus niños tengan a cargo una mascota o una huerta en casa. Así que conecta con tu hijo cuidando juntos de una mascota o planta.

¿Cómo conectar emocionalmente con tu hijo cuidando a sus mascotas?

Tener una mascota es tener una gran responsabilidad, pero también es tener un amigo fiel, un compañero de juegos para tus hijos y un método excelente para conectar con ellos a un nivel mucho más profundo y significativo. Aquí las acciones que puedes llevar a cabo para lograrlo:

• Aprovecha las buenas temperaturas para disfrutar con tus hijos al aire libre: saca de paseo a tu mascota y permite que juegue junto a tus hijos. Si se trata de reptiles (tortuga, por ejemplo) limpien su pecera mientras ponen al sol al animalito.
• Haz partícipe a tu hijo del cuidado de la mascota para mejorar su educación en valores.
• Asígnale las tareas que le corresponden y hazlo acorde a la edad y nivel cognitivo que tenga. Por ejemplo, sacarle a pasear, estar pendiente de qué día le toca las vacunas, dedicarle tiempo de juego a la mascota o rellenar su bebedero cuando sea necesario.
• Asimismo, para conectar con tu hijo y vivir momentos únicos que recordarás toda la vida, es importante que aprendan juntos cómo es la mascota, qué necesidades tiene y cómo lograr su máximo bienestar.
• Organiza un plan familiar que incluya a la mascota como puede ser una sesión de juegos en casa, una tarde en el parque o una salida al campo.
• Establecer dentro de la rutina semanal un momento para la mascota te permitirá compartir tiempo de calidad con ella y con los niños. 
• Documenta las experiencias vividas con la mascota a través de fotos y vídeos, y busca un día de cada mes para reunir a todos en el salón y verlas como si de la mejor película se tratara.

También puedes conectar con tu hijo a través de la jardinería

El cuidado de las plantas en el hogar o jardinería también puede ser de lo más útil y beneficioso para mantener y reforzar esa conexión con los hijos de la que te venimos hablando. Así que permite que los niños sean los encargados oficiales de cuidar algunas plantas: de regarlas cuando sea necesario, quitar las hojas secas o incluso de trasplantarlas a una maceta más grande según vayan creciendo.

Observa el crecimiento y evolución de las plantas, los frutos que dan o las flores que brotan y comenta con los niños qué les parece, cómo se sienten al ser parte de este logro. De la misma manera que lo puedes hacer con la mascota, también puedes buscar información sobre las plantas: de qué tipo son, cuánto pueden llegar a crecer, qué alimentos o frutos pueden dar.

Si eres maestro o maestra puedes tener plantas en clase para conectar con tus alumnos, fomentar su responsabilidad y el trabajo en equipo y hacerles sentir que son parte imprescindible de su grupo clase. Puedes pedirles un par de semillas para sembrar y que en la escuela sean responsables de regarlas y procurarlas con abono y ponerlas al sol por periodos cortos.

7 beneficios de involucrar a los niños en las tareas cotidianas

Que los hijos, tengan la edad que tengan, participen en el cuidado de la mascota o de las plantas tiene un montón de beneficios, tantos que no tardarás en verlos por ti misma:

1. Estás educando a tus hijos en la responsabilidad y el compromiso que tienen para con estos seres vivos que ya forman parte de la vida familiar.
2. Se fomenta la comunicación abierta en un entorno agradable: mientras paseas a la mascota puedes hablar con los niños de su día, de lo que han aprendido en la escuela, acerca de cómo se sienten; así como ser tú misma la que les cuente lo que te agrada, inquieta o preocupa.
3. Asimismo, se trabaja la empatía hacia otras personas y mascotas. Tener a cargo a un animal es un gran compromiso por parte de toda la familia.
4. A través del cuidado de las plantas se trabaja la atención y la concentración, además de disponer de momentos únicos para la conversación entre padres e hijos.
5. Ayudar a cuidar a la mascota y a las plantas que tenemos en el hogar, ver cómo los cuidados dan sus frutos, aumenta la autoestima, la sensación de bienestar emocional y el sentimiento de logro y confianza en uno mismo.
6. Las interacciones con los animales domésticos liberan endorfinas y reducen los niveles de estrés tanto de los hijos como de nosotros mismos: acaricia a tu mascota y juega con ella a diario.
7. Por otro lado, este tipo de rutinas favorecen su madurez, así como la unidad familiar y un clima de confianza y bienestar.

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