19 frases que JAMÁS deberíamos escuchar como madres y padres

Conoce las 19 frases que JAMÁS deberíamos escuchar como madres y padres, ya que pueden dejar una huella muy difícil de borrar. Se trata de frases que los padres NO deberían oír nunca porque hieren profundamente, a la vez que cuestionan su paternidad y las decisiones que toman respecto a sus hijos.

19 frases que los padres NO deberían oír nunca porque hieren profundamente

A continuación te dejamos las frases que nadie debería decir a ningún padre o madre, por mucho que crean que le 'están haciendo un bien' al comentárselo. Son frases que pueden herir profundamente y generar un sentimiento de insuficiencia o de ser malos padres. Evita decirlas y también aprende qué contestar si te llegan a decir alguna de ellas:

1. 'El niño estaba bien hasta que has llegado'.

Esta es la frase más clásica de todas y la que puede poner en duda nuestra maternidad.

2. 'No eres un buen ejemplo para tu hijo'.

¿Verdad que al leerla hace mucho daño? ¡Jamás la digas!

3. 'Seguro que si tuvieras más tiempo para él, se comportaría mejor'.

Esto no hace más que reforzar la culpa (sobre todo en las mamás) que trabajan fuera de casa.

4. 'Los hijos de tu prima/comadre/amiga nunca hacen eso'.

Comparar a los niños jamás se debe hacer, si ni entre hermanos está bien, mucho menos con los demás.

5. 'Si yo fuera tú, mi hijo no actuaría así'.

Aunque quieran disfrazarlo de 'empatía' la realidad es que juzgan tu actuar.

6. 'Se porta así porque obviamente no le pones suficiente atención'.

La exigencia por estar al tanto de todos los movimientos del niño hace que dudemos de hacerlo bien.

7. 'Es fácil ver de dónde saca ese comportamiento: es igual a ti'.

Este tipo de comentarios hace que cuestionemos nuestra propia niñez: ¿me habrán criado bien?

8. '¿No te da vergüenza cómo se comporta tu hijo?'

Sin duda, de las frases que más hacen daño, no debería existir más.

9. 'Deberías ser más como tu hermana/prima/sobrina que sí son buenas mamás'.

Las comparaciones con las 'mamás perfectas' solo minará la autoestima.

10. 'No estás haciendo un buen trabajo con tu hijo'.

¿Quién pone los parámetros de si es correcta una cosa o la otra?

11. 'Claramente a este niño le falta una buena disciplina'.

La disciplina debe establecerse desde el amor y la contención, ¡siempre!

12. 'Si fueras más estricta con tu hijo, esto no pasaría'.

Muchas personas creen que es mejor tener 'mano dura' al educar a un niño.

13. 'Tal vez si pasaras más tiempo en casa...'

Esta frase es el inicio de volver a echarle la culpa a mamá o papá que salen cada día a trabajar.

14. 'Debe ser difícil aceptar que otros lo hacen mejor que tú'.

Este tipo de frases suelen ser pasivo-agresivas y no es nada bonito que te las digan.

15. 'Tienes que controlar mejor a tu hijo, ¡de todo hace berrinche!'

El control es muy distinto a la validación de las emociones de tu hijo, ¡ojo con eso!

16. 'Esperaba mucho más de ti como padre/madre'.

¿Habrá suegras o las propias madres que nos digan esto? Sí, por supuesto que sí.

17. 'Eres demasiado blandita con el niño, ya te agarró la medida'.

Suele ser una frase muy común, sobre todo para la madre quien empieza a dudar de su forma de maternar.

18. 'Parece que no sabes nada sobre cómo ser mamá y eso que tienes dos hijos'.

La cantidad de hijos NO nos enseña cómo ser buenos o malos padres, no tiene nada qué ver.

19. 'Debes estar haciendo algo mal para que se comporte de esa manera'.

Esta frase siempre se asocia a que se consiente de más al niño, pero no es sinónimo de culpa de la madre/padre.

¿Por qué jamás deberíamos oír estas frases como madres y padres?

Las frases que ya hemos visto del tipo 'ya es mayor para hacer esas cosas' o 'estaba bien hasta que tú has llegado, justamente son ese tipo de frases que la sociedad está muy acostumbrada a soltar, pero que no está acostumbrada a recibir una respuesta lógica porque se escudan en 'cómo te voy a hacer sentir mal' o 'yo tengo razón en lo que estoy diciendo' y eso es muy importante para trabajar la culpa.

Para vivir la maternidad principalmente, de una manera más cómoda es importantísimo tener respuesta para cada una de estas frases que nos suelta la gente sin pensar. Se trata de saber cómo poder responder a estas situaciones para dejar de sentirnos tan culpables y para entender que todo lo que sucede y que se relaciona con estas frases si sucede es porque estamos criando bien a nuestros hijos.

Sí, porque ellos están recibiendo el amor, el afecto, la atención y la compañía que necesitan. Si retomamos el ejemplo de la frase 'estaba bien hasta que tú has venido' que aplica cuando dejamos al niño con algún pariente y el pequeño ha estado estupendamente toda la tarde entre comillas. De pronto llegas tú y el niño se pone a llorar y entonces sueltan el 'uy estaba fenomenal hasta que tú has venido'.

A veces nos dicen que tiene mamitis o está muy consentido. La realidad es que cuando vienes tú el niño sabe con quién puede compartir sus cosas, básicamente porque sabe lo que le ofrece cada persona y si no lo sabe entonces toma distancia hasta que lo reconoce. Por eso cuando ve a su madre o ve a su padre generalmente muestra las emociones que de verdad siente.

Si algo le ha molestado, le ha dolido o le ha asustado, entonces lo suelta en el momento que se siente totalmente seguro para hacerlo. No es que tenga mamitis o muy apegado a mamá, lo cual es fenomenal porque quiere decir que el niño se siente seguro, cómodo y protegido. Así que con ese tipo de frases tenemos que trabajar para quitarnos culpa y entender que la gente las dice sin pensar.

Así pues, la mamitis, que se ve como algo negativo, en realidad es beneficiosa porque ayudará a tu hijo a ser un adulto independiente y seguro, ya que fue un bebé dependiente, apegado, sostenido y amado. Preocúpate cuando no consigan establecer ese apego seguro porque se generan heridas que permanecerán para toda la vida. De ahí que la infancia sea la etapa más trascendente para la formación del ser humano.

Cómo actuar ante los comentarios hirientes sobre tu forma de maternar

Cuando un padre o una madre se enfrenta a comentarios hirientes o críticas severas sobre su forma de criar a sus hijos, la situación puede ser emocionalmente estresante. Aquí algunos consejos sobre cómo actuar:

1. Mantén la calma. La primera reacción a un comentario negativo puede ser defensiva o incluso contraatacar, pero debes mantener la calma. Respira hondo y dale tiempo a tus emociones para que se asienten antes de responder. Demuestra madurez y autocontrol.
2. Evalúa la intención. Intenta discernir si la persona que hizo el comentario realmente buscaba ser hiriente o si simplemente expresó su opinión de manera poco cuidadosa. Entender la intención puede ayudarte a decidir la mejor manera de responder.
3. Responde con firmeza y respeto. Si decides responder, hazlo de manera firme pero respetuosa. Puedes decir algo como: 'Entiendo que puedes tener una perspectiva diferente, pero me gustaría que respetaras mi enfoque hacia la crianza de mis hijos'. Establece límites claros.
4. Considera el contexto. Si la crítica proviene de alguien cercano cuyas opiniones valoras, considera si hay algún elemento de verdad en sus palabras que podrías utilizar para mejorar. Pero si la crítica es constantemente negativa y sin fundamento, podrías reevaluar la dinámica de esa relación.
5. Busca apoyo. Habla con amigos, familiares o un grupo de apoyo de padres que entiendan lo que estás pasando. Ellos pueden ofrecerte la perspectiva y el aliento que necesitas para manejar la situación.
6. Protege a tus hijos. Asegúrate de que tus hijos no estén presentes durante discusiones o críticas para protegerlos de posibles efectos negativos. Es importante que los niños se sientan seguros y no se vean afectados por tensiones externas.

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