Aparte de todos estos regalos que salen del corazón de los niños, también se puede considerar los regalos que los hijos, con la ayuda de los padres, eligen a su mamá. De una forma o de otra, de lo que se trata es de sorprender a las reinas de la casa.
Se puede felicitar a las madres por su día también con mensajes escritos con imanes. Le encantará a los niños, especialmente los más pequeños. Una forma original de decir a sus mamás que las quieren.
Con un poco de imaginación los niños podrán preparar un postre muy exquisito para su mamá. Con algunas fresas, una manzana, unos trocitos de plátano y chocolate, se puede elaborar este delicioso postre en el Día de la Madre.
Una forma de animar a los niños a que compartan es sugerirles que regalen a su mamá alguno de sus peluches favoritos o que le compren uno muy gracioso como este osito.
Con la ayuda de los padres, los niños podrán preparar o encargar una deliciosa y exquisita tarta para el Día de la Madre. Una forma de endulzar este gran día.
Con algo de imaginación y fantasía, los niños pueden elaborar un regalo muy curioso: la imagen de su mamá, hecha de plastilina o de barro. Un recuerdo que se quedará para la eternidad en el corazón de la madre.
A las madres también les hará ilusión que en su gran día, los hijos les ayude en la cocina. Juntos, podrán preparar una tarta o una comida especial. Una forma muy original de sorprender a la reina de la casa.
Los niños podrán montar una fiesta para la madre en su día. Los globos darán un toque de color a la casa y a los ojos de las mamás. Aparte de inflarlos, los niños también podrán escribir pequeños mensajes con rotuladores en casa globo.
A los niños les encantan dibujar. Pues un dibujo puede ser un entrañable regalo para el Día de la Madre. Una dulce y original forma para que ellos feliciten a sus mamá por este gran día.
¿Qué os parece si endulzamos el Día de Madre preparando estas curiosas galletas o simplemente comprándolas en algún supermercado? Una galleta con todo el corazón para mamá.
Si a la madre le gusta las plantas, estaría bien que los niños le hicieran una manualidad. Nada mejor que un tiesto pintado con los dedos por los hijos para arrancar una sonrisa de la madre. Para rematar, se podría plantar alguna flor.
Estaría bien preparar un montón de pequeños mensajes de cariño y de amor para la madre y luego esparcirlos por toda la casa, en las puertas, armarios, baño, cocina, nevera... Seguro que le alegrará el día.
El Día de la Madre puede empezar con un buen desayuno sorpresa. Que los papás, juntamente con los hijos, se levanten prontito y se vayan luego a la cocina a preparar un delicioso desayuno para la madre. ¡Ella se lo merece!
Cuando los hijos son muy pequeños, los padres pueden ayudarlos a que hagan esta original manualidad. Se pone en un plato algo de yeso líquido y, antes de que se endurezca, grabar la mano del hijo (o hija). Le encantará a la madre.
En apenas unos cuantos minutos se puede elaborar una bonita tarjeta de felicitación para la madre. Con una hoja de papel, lápices, rotuladores y pinturas, se puede expresar todo el cariño que ella se lo merece.
Violetas, rosas, orquídeas, margaritas... las flores son unos de los regalos que más arrancan la sonrisa de las madres. Sus colores, así como su olor, expresa vitalidad y alegría. Las flores, aunque sea una, darán un toque de satisfacción al Día de la Madre.
A quién lo le gusta recibir un beso, ¿verdad? Para muchas madres, el beso sabe a dulzura y ternura, especialmente cuando proviene de las criaturas que más quieren ellas: sus hijos. Un beso, el mejor regalo para mamá.
¡Es increíble todo lo que puede representar un abrazo! Es un regalo que además de animar y alegrar a una madre, le hará sentir la persona más querida del mundo. Está comprobado, científicamente, que el abrazo es un tónico excelente tanto para el que abrazo como para el que es abrazado.