Los niños podrán jugar y aprender a reciclar a la vez a través de esta actividad. Con un poquito de imaginación y una caja de cartón, podrán crear un coche, un castillo, unos zapatos, una casa,... Aprende y enseña a tus hijos a crear un juego o un juguete casero con estas propuestas originales y divertidas.
La globoflexia es el arte de hacer figuras o formas con globos (balones o bolas de inflar). Es una manualidad ideal para los niños, que se puede elaborar en cualquier lugar u ocasión, principalmente en las fiestas de cumpleaños o en otras celebraciones familiares.
Origami o Papiroflexia es el arte de origen japonés del plegado de papel para obtener figuras de formas variadas. Es una disciplina que se origina en el Oriente y se practica para combatir el estrés y la depresión, para desarrollar y estimular la motricidad fina, las habilidades manuales y la concentración de los niños. ¿Te animas?
La plastilina es un material que puede proporcionar sensaciones placenteras para los niños y al mismo tiempo les estará ayudando a crear conexiones cerebrales propias. El moldeado de la plastilina anima al niño a aprender. A través de la plastilina el niño imagina, crea, y a la vez materializa los pensamientos que tienen en su mente.
El teatro es el escenario perfecto para que los niños disfruten, liberen endorfinas y fomenten su creatividad e imaginación. Les permite elaborar situaciones cotidianas, reflejarse en los distintos personajes y conocer diferentes realidades. El jugar con el teatro de marionetas ayuda a los niños a expresarse y a comunicarse, promueve su juicio crítico, valora su espontaneidad y despierta sus fantasía.
En muchas ocasiones nos preguntamos de qué forma podríamos motivar a los niños a pintar, dibujar y colorear, aunque sean actividades que despiertan mucho su interés. El dibujo, así como la pintura, permite al niño a ser libre, a divertirse y a dar riendas a su naturalidad y espontaneidad. Son actividades con las que los niños pueden ‘dar alas’ a su imaginación y fantasía.
Si hay un juego que facilite las risas y las carcajadas a los niños eso son los chistes, las adivinanzas y los trabalenguas. Además, son juegos que les estimulan a comunicarse positivamente, a expresarse con más facilidad y a hacer amigos. A través de estos juegos, los niños se imaginan más envueltos en un protagonismo sano.
La música, así como los movimientos del cuerpo, animan la imaginación de los niños. Son actividades que ayudan a los niños a descargar tensiones, a potenciar su sociabilidad e integración, y a despertar sentimientos y sensaciones positivos. La canción, el baile y los niños poseen una estrecha relación que genera estímulos a la fantasía. El tocar un instrumento potencia su creatividad.
A los niños les encanta hacer cosas de mayores. Cocinar es una de ellas. Eso de emplear sus manos para amasar, mezclar y probar texturas y sabores variados, permite a los niños experimentar sensaciones que pueden despertar su creatividad y fantasía. Si pretendes jugar a ser cocinero con tus hijos, es necesario darles libertad y seguridad a la vez. Ojo a los utensilios que les pueden lastimar.
Al intentar volar una cometa los niños experimentan una gran sensación de libertad, de velocidad y de movimiento en su cuerpo. Es como si de repente ellos empezasen a tener alas y pudiesen volar como una cometa. Es un buen recurso para hacer volar la imaginación de los niños.
Cuando los niños juegan a disfrazarse para ser médicos, hadas, profesores, veterinarios, bomberos, incluso a ser un súper héroes, estarán interiorizando distintos sentimientos, conductas y cualidades como son el ingenio, el valor, la dulzura, la magia, la valentía e iniciativa.
El libro es un amigo y una fuente inagotable de fantasía para los niños. Leer o escuchar un cuento proporciona información y crea hábitos de reflexión, de concentración, aparte de que también hace al niño recrear situaciones, entretenerse y distraerse. La lectura mejora las expresiones, el lenguaje, despierta la creatividad y la curiosidad de los niños.