3 cuentos cortos con el nombre de María sobre las emociones para reflexionar
Es vital para los niños saber manejar las emociones como la alegría, el enfado o la tristeza y nada mejor que los relatos para hacerlo
- Cuentos cortos para niños sobre las emociones - El violín de María
- Cuento corto de las emociones básicas - María está enfadada
- María se siente triste - Cuento corto para niñas de nombre María
- ¿Cuál es la importancia de saber manejar las emociones en los niños?
- Algunas curiosidades que no sabes del nombre María para niñas
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Las emociones de los niños a veces son difíciles de regular y explicar, pero con estos 3 cuentos cortos con el nombre de María sobre las emociones para reflexionar, tu hija con este nombre aprenderá a regular sus sentimientos. Además, el hecho de tener su nombre la harán sentirse identificada al 100 por ciento y estos cuentos cortos te serán muy útiles para enseñar y comprender a tus hijos.
La alegría, el enfado y la tristeza son emociones básicas en los pequeños que muchas veces no pueden o no saben expresar correctamente, por eso no hay nada mejor que los cuentos para ayudarles a regular esas emociones. Acompañen a la pequeña protagonista de estos cuentos a saber qué hacer cuando está alegre, enfadada o triste.
Cuentos cortos para niños sobre las emociones - El violín de María
María era una niña muy especial porque tenía un corazón lleno de emociones que parecían bailar muy suavecito dentro de ella. María vivía en una pequeña casa de ladrillos rojos en el corazón de una ciudad llena de luces y colores. A ella le gustaba mucho la música, tanto que le pidió a sus padres que la dejaran tocar un instrumento. Sus padres no tenían mucho dinero y por eso se sorprendieron cuando pidió un violín.
María quería con todas sus fuerzas ese violín aunque sabía que era difícil porque sus padres no podían pagarlo. Un día notó que algunos niños parecían estar tristes y entonces su corazón se llenó de tristeza también. Al preguntarles qué les pasaba le dijeron que no podían estar en una orquesta porque no tenían instrumentos. Hugo, uno de ellos, le dijo que sus papás no podían darle un clarinete y eso lo frustraba.
Entonces, María tuvo una idea. Corrió a su casa, tomó su cuaderno y comenzó a dibujar. Dibujó cada uno de los instrumentos que los niños querían. A Hugo le dio su clarinete, a Emilia su pandereta, a Luis una trompeta y a Susana una armónica. Ella, por supuesto, se dibujó su amado violín. Entonces les pidió que con su imaginación comenzaran a tocar. De pronto la música en sus cabezas les hizo estar nuevamente alegres.
Poco a poco comenzaron a escuchar realmente los acordes de cada uno de sus instrumentos y se veían muy felices. ¡Había vuelto la alegría! María comprendió que la música era el verdadero medio para ser felices. Desde entonces se reunían para hacer música en su imaginación, hasta que un día María llegó con un viejo violín que sus papás pudieron comprarle, por lo que siempre lo tocaba alegremente.
Cuento corto de las emociones básicas - María está enfadada
La pequeña María iba a la escuela cada mañana con la esperanza de ser ella la que ahora sí participara en clase y la maestra la tomara en cuenta. Tenía días que alzaba la mano para participar y parecía que la profesora no le hacía caso. La realidad es que la maestra sabía que María era muy inteligente y podría saber las respuestas claramente, solo quería que los demás participaran.
Pero esto enfadaba mucho a María. Sus mejillas estaban rojas y los puños apretados, estaba realmente enojada porque la maestra no le hiciera caso. ¡Estaba convencida que lo hacía a propósito! María sentía ese enfado y no sabía qué hacer con él. Así con sus puños apretados y sus mejillas encendidas se la pasó toda la clase, entonces la maestra notó que era hora de hacer algo al respecto.
La maestra se acercó a María y le dijo: 'El enfado es como un fuego. Si lo alimentas, se hace más grande, pero si respiras profundamente y te calmas, el fuego se apaga. No he tomado tu participación en estos días porque quiero que los demás lo hagan. Tú eres muy inteligente y no necesitas demostrarlo más, ¿me comprendes? No has hecho nada mal'. Entonces, María respiró hondo y se empezó a tranquilizar.
Hasta ese momento María comprendió que era muy competitiva y eso no le hacía ver que los demás necesitaban también participar, entonces se calmó y supo que su enfado no tenía razón de ser. Poco a poco, su cara roja se fue relajando, sus puños se abrieron y el enfado empezó a desvanecerse. Desde aquel día, María aprendió a manejar sus emociones, especialmente cuando el enfado parecía tomar el control.
María se siente triste - Cuento corto para niñas de nombre María
En un pequeño pueblito rodeado de montañas y ríos, vivía una niña llamada María. Ella era muy amigable y le gustaba ayudar a los demás, pero un día, cuando supo que su hermana se iría a estudiar a la capital comenzó a perder su alegría. Nada la consolaba, ni siquiera su amigo Jorge que iba diario a verla para jugar juntos a la pelota en el patio. Simplemente María estaba muy triste.
Jorge le dijo: 'Veo que estás triste. Perder algo que quieres mucho puede ser muy difícil y aunque tu hermana se va por un tiempo, piensa que lo hace para ser una gran abogada', le dijo abrazando a María. Ella sabía que era lo mejor pero no dejaba de sentirse triste. María sabía que es importante no ignorar la tristeza, sino entenderla y aprender de ella.
Entonces, Jorge la animó a hablar sobre cómo se sentía. Al principio, a Jorge le costó comprenderla, para él no había problema, pero poco a poco entendió la tristeza de su amiga. María reflexionó y le explicó: 'Sé que es normal sentirse triste cuando se va alguien que queremos mucho. Pero las emociones son como las nubes, vienen y van. Ahora estoy triste, pero después me sentiré mejor'.
A Jorge le sorprendió mucho verla calmarse y aunque ella no estaba del todo feliz, aprendió que la tristeza también es bueno sentirla. Así, pasaron los días hasta que un soleado domingo María estaba llorando en su habitación cuando sintió la voz de Emilia, su hermana: '¿María? Ya no estés triste, he regresado por un tiempo'. María la vio y la abrazó, y aunque sabía que se iría de nuevo, ya no estaba triste.
¿Cuál es la importancia de saber manejar las emociones en los niños?
El manejo de las emociones en los niños es fundamental para su desarrollo, porque al entender y gestionar sus propias emociones desde pequeños ayuda a los niños a establecer una base sólida para su bienestar emocional a largo plazo. Además de identificar sus emociones, desarrollan un mejor autoconocimiento, lo que les permite entender qué les causa alegría, tristeza, enfado, miedo, entre otros.
También pueden desarrollar la empatía, lo que les permite a entender mejor las emociones de los demás. De igual manera, manejan de forma adecuada los conflictos, favoreciendo la toma de decisiones equilibradas y respetuosas. Esto retribuye en una buena salud mental, porque saber manejar las emociones evita que las emociones negativas se acumulen.
Todo esto ayuda a evitar problemas más graves como la ansiedad o la depresión. En los pequeños, si no saben regular sus emociones, se ve desfavorecido el rendimiento escolar, ya que las emociones impactan en su capacidad de concentración y aprendizaje. Así que un adecuado manejo emocional mejora el rendimiento académico de los niños.
Algunas curiosidades que no sabes del nombre María para niñas
El nombre de María es de los más usados y reconocidos en todo el mundo, incluso no solo en los de habla hispana, aquí unas curiosidades sobre este nombre para niñas:
- Es de origen hebreo. María proviene del hebreo Myriam y se traduce como 'la elegida' o 'la amada de Dios'.
- Goza de mucha popularidad. María se utiliza en muchas culturas y se encuentra en muchas variantes, como Mary en inglés, Marie en francés o Mariya en ruso.
- Se puede hacer muchas combinaciones. El nombre de María es a menudo usado en nombres compuestos como María José, María del Carmen o Ana María.
- Día de Santo. En el santoral católico, se celebra el nombre de María en diversas fechas a lo largo del año debido a las múltiples advocaciones de la Virgen María.
- Se usa mucho en la realeza. Este nombre ha sido muy común entre la realeza europea y figuras religiosas. Varios reyes, reinas y santos lo han llevado a lo largo de la historia.
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Bibliografía
- Martínez Urbano, N. (2011) El cuento como instrumento educativo. Revista Innovación y Experiencias Educativas (ed.) España, pp. 1-8 Disponible en: https://archivos.csif.es/archivos/andalucia/ensenanza/revistas/csicsif/revista/pdf/Numero_39/NATALIA_MARTINEZ_URBANO_01.pdf