Pinchón. Cuento corto en vídeo de los berrinches y enfados de los niños

Pinchón, el protagonista de nuestro cuento, es un simpático y tierno erizo que, como todos los niños, algunas veces tiene una rabieta. Los cuentos cortos son una estupenda herramienta de educación emocional para que tus hijos aprendan a identificar sus emociones y gestionarlas con un poquito de acompañamiento y de sus padres. Comparte con ellos el cuento del erizo Pinchón, escrito por Elena Barroso. Se trata de un cuento corto en vídeo que habla sobre los berrinches y enfados de los niños.

Resumen del cuento corto en vídeo de Pinchón para niños

Resumen del cuento: El erizo Pinchón se despertó un día con muy pocas ganas de jugar o sonreír; el día era muy nublado y se habían acabado los frutos rojos que tanto le gustaba desayunar. ¡Qué rabia! Y, de repente, una de sus púas se puso bien tiesa y puntiaguda... Y cuanto más se enfadaba, ¡más púas se le erizaban! Preso de ira, se chocó con su pelota azul preferida que se pinchó con una de esas púas. ¡Qué enfadado estaba Pinchón! Por suerte, su mamá estaba cerca y le enseñó a respirar para calmarse.

¿Habéis visto ya el cuento en vídeo del erizo Pinchón? ¿Aún no? ¡A qué esperáis! A los niños les va a encantar pues es una historia muy linda con la que se pueden sentir identificados. Y es que los berrinches son explosiones emocionales completamente normales en la infancia; es la forma en la que los niños expresan emociones como la frustración, la rabia y la ira. ¡Y es que aún están aprendiendo a gestionar cómo se sienten!

A través de un cuento corto en vídeo como este y las actividades que a continuación te proponemos, tus hijos aprenderán que es normal enfadarse o estar tristes, ya que son emociones básicas que todos sentimos en algún momento. Cuando el erizo Pinchón siente rabia, se le ponen muy puntiagudas sus púas; pero puede que tu hijo sienta mucho calor en la cara o que sienta que las tripas se le estrujan. Se trata de que los niños aprendan a identificar esas emociones y las herramientas que tienen a su disposición para gestionarlas.

En el caso del berrinche del erizo Pinchón, comienza a calmarse cuando su mamá le recuerda que tiene que respirar tranquilamente. El abrazo que ambos se dan, es el broche de oro para que ambos sientan su apoyo y cariño.

Actividades de educación emocional para tus hijos

Una vez que habéis visto el cuento corto en vídeo de Pinchón, puedes hacer algunas actividades educativas con tus hijos relacionadas con la educación emocional, pero también con la comprensión del relato y la creatividad. A continuación te proponemos algunos juegos y ejercicios, pero no dudes en adaptarlos a los gustos y edad de tus hijos.

1. Comprensión del cuento
Lo primero que vamos a hacer es comprobar si los niños han prestado atención al cuento y si han conseguido extraer el mensaje general que este transmite. Para ello, te proponemos algunas cuestiones relacionadas con la historia. En caso de que tengáis dudas sobre alguna de las respuestas, podéis volver a ver el vídeo todas las veces que queráis.

¿Te acuerdas de algunas de las actividades o juegos que le gustaban a Pinchón?
¿Qué hace enfadar al erizo protagonista del cuento?
¿Qué ocurre en las púas de Pinchón cuando se enfada o tienen una rabieta?
¿Qué ocurre con la pelota azul?
¿Cómo consigue tranquilizarse del berrinche?
¿Cómo termina el cuento?

2. Las emociones de Pinchón
Como parte de ese trabajo emocional que queremos hacer con nuestros hijos a partir de este cuento corto en vídeo, podemos hacerles algunas preguntas que les harán reflexionar. La próxima vez que sientan enfado o tengan un berrinche o una rabieta, puedes recordarles la historia de Pinchón (cuando estén calmados, no en plena pataleta), y cómo respirar le ayudó a sentirse bien.

¿Cómo se siente Pinchón cuando tiene las púas tiesas?
¿Alguna vez te has sentido tú así?
¿Cómo sentías en tu cuerpo esa emoción de enfado?
¿Qué hace Pinchón para calmarse?
¿Quieres que respiremos como Pinchón?
¿Crees que respirar como él te ayudará la próxima vez que tengas un berrinche?

3. ¿Qué Pinchón te sientes ahora?
Prepara lápices de colores y rotuladores y dibujad a vuestro propio erizo Pinchón. Podéis dibujarlo estando feliz y, por otro lado, estando enfadado. Es importante que, mientras hacéis el dibujo, remarques en tu hijo qué emoción corresponde con cada imagen.

A continuación, podéis colgar ambos dibujos en la pared de la habitación del niño. Cuando se despierte por la mañana o cuando vuelva del colegio, puedes pedirle que señale el erizo Pinchón que corresponda a cómo se siente en ese momento.

Para que este juego sea más completo, podéis ir haciendo diferentes dibujos de Pinchón con distintas emociones: felicidad, enfado, tristeza, miedo, amor...

4. Inventad vuestra propia historia
¿Sueles inventar cuentos con tus hijos? Es un ejercicio muy creativo y un juego divertidísimo. No hace falta que os compliquéis mucho: elegid otro animal (¡el favorito de los niños!) y pensad en algún motivo que le puede hacer enfadar. A continuación, solo tenéis que explicar cómo expresa el berrinche o rabieta.

Otros cuentos infantiles sobre rabietas y berrinches de los niños

Los cuentos cortos son una herramienta muy útil para que los niños comprendan conceptos complicados, pero también para darles ejemplos prácticos de cómo se pueden comportar ante distintas situaciones. Por ello, en Guiainfantil.com tenemos otros cuentos infantiles sobre los berrinches y los enfados de los niños. Compártelos con tus hijos.

- Mabel y sus rabietas
Cada vez que la niña Mabel entraba en una tienda de dulces quería comprarse una chuchería, pero no siempre se la podía comprar, lo que hacía que explotara en una rabieta muy grande. ¿Sabes cómo aprende a controlar su frustración? Descúbrelo leyendo el cuento.

- Hugo aprende a controlar la ira
Hugo a veces siente mucha ira y no sabe qué hacer para calmarse. A su prima Miriam no le gustaba nada verle tirado por los suelos, dándose golpes o llorando desconsoladamente. Por eso, juntos aprenden a gestionar una emoción tan complicada como la ira.

- La ira de Gancho
Gancho es un pequeño canguro que, cuando se siente muy enfadado, da puñetazos a aquel o aquello que esté cerca. Por suerte, sus amigos los animales le enseñarán que, aunque todos podemos sentirnos rabiosos, no podemos hacer daño a otros. ¡Son mejores los abrazos!

- El niño de los clavos
¿Qué pueden hacer los niños cada vez que sienten rabia? Depende mucho de cada pequeño, pero el papá del niño protagonista de este cuento encuentra una estrategia muy sencilla y que ayuda a su hijo.

- Es una rabieta
Y, por último, te proponemos un poema con pictogramas que también habla sobre los berrinches de los niños. Al tener pequeños dibujos o pictogramas, hasta los niños más pequeños podrán seguir la lectura.

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