Tengo una mamá. Cuentos sobre familias monoparentales para niños

En Tengo una mamá. Cuentos sobre familias monoparentales para niños, encontrarás historias que celebran el profundo amor y la dedicación de todas las madres solteras. Son cuentos cortos que ayudarán a los pequeños a entender que las familias no necesariamente deben contar con mamá y papá, sino que pueden ser diferentes y que lo que realmente importa es el cariño y el apoyo que se dan unos a otros. ¡Perfectos para leer junto a tu pequeño!

Cuento corto sobre las mamás solteras - Tengo una mamá

Mateo era un niño muy feliz. Vivía con su mamá en una casa pequeña, pero acogedora y llena de amor. Un día, en la escuela, sus amigos hablaban de sus papás: 'Mi papá me llevó al parque', 'Mi papá me enseñó a montar en bicicleta' o 'Mi papá me lleva de paseo los domingos'. Mateo los escuchaba con atención, pero él siempre decía con una gran sonrisa: 'Yo tengo una mamá que lo hace todo'.

La mamá, Laura, trabajaba mucho pero siempre encontraba tiempo para estar con él. Los sábados salían a pasear por el parque y Mateo montaba su bicicleta. Los domingos, preparaban juntos panqueques con miel y fresas. ¡Era su momento especial! Un día, en la clase, la maestra pidió que los niños dibujaran a su familia. Algunos dibujaron a sus papás, otros a sus abuelitos, y Mateo dibujó solo a su mamá.

La dibujó con una gran sonrisa y, a su lado estaba un sol brillante. '¿Por qué está este sol?', preguntó la maestra. 'Porque mi mamá es mi sol, ella es mi todo, es la mejor porque siempre me hace reír y me cuida mucho'. En el recreo, un niño le preguntó a Mateo: '¿Y tu papá dónde está?'. Mateo no se sintió triste, solo le dijo lo que su mamá siempre le decía: 'Las familias son diferentes y todas están llenas de amor'.

'Yo sé que no tengo papá, pero tengo una gran mamá que me da mucho amor. ¡Y eso es lo que importa!'. Por la tarde, cuando Mateo llegó a casa, abrazó a su mamá muy fuerte. '¡Eres la mejor mamá del mundo!', le dijo. Laura sonrió, le acarició el cabello y le respondió: 'Y tú eres el mejor hijo del mundo'. Juntos, se sentaron a disfrutar un juego de mesa y platicaron acerca de su día, como lo hacían siempre.

El mejor equipo - Relato breve sobre una familia monoparental

Sofía vivía con su mamá, Gabriela, en un departamento pequeño, pero con todo lo que ambas necesitaban. A veces, cuando los compañeros de Sofía hablaban sobre sus papás, ella se quedaba callada. No es que se sintiera triste, solo que no sabía qué decir. Un día, en la escuela, la maestra pidió que todos contaran quién los ayudaba con sus tareas. Algunos dijeron que sus papás, otros que sus abuelitos.

Cuando fue el turno de Sofía, ella sonrió y dijo: 'Mi mamá y yo somos el mejor equipo'. Esa tarde, Gabriela llamó a Sofía para hacer su rutina especial. Primero prepararon la cena y mientras Sofía ponía la mesa, Gabriela cocinaba. Sofía ayudaba a cortar las verduras, aunque todavía necesitaba aprender a hacerlo más rápido. 'Tranquila, hija', decía su mamá con una sonrisa, 'lo importante es que lo hacemos juntas'.

Después de cenar, Sofía y su mamá se sentaron a hacer la tarea. Cuando había algo difícil, se tomaban un respiro, bebían un vaso de leche y luego lo intentaban de nuevo. 'No te rindas', decía Gabriela, 'porque somos un gran equipo'. Y así, lograban resolver cualquier problema, juntas, siempre. Un fin de semana, en el parque, un niño se acercó a Sofía y le preguntó: '¿Por qué solo está tu mamá? ¿Y tu papá?'

Sofía pensó por un momento y luego dijo con una gran sonrisa: 'No tengo papá, pero tengo a mi mamá, ¡y hacemos todo juntas! Eso es lo que nos hace un gran equipo'. Esa noche, Sofía y Gabriela se abrazaron antes de dormir. '¿Sabes, mamá?', dijo Sofía, 'no me importa que no esté mi papá. Me encanta tenerte a ti'. Gabriela respondió: 'Y a mí me encanta que somos una familia de dos: tú y yo como el mejor equipo'.

Cuento para niños acerca de una mamá soltera - Dos hermanos

La casa de Mariana siempre estaba llena de risas y alboroto porque tenía dos hijos: Andrés y Valeria. Mariana siempre se levantaba temprano para preparar el desayuno y llevar a los niños a la escuela. 'Buenos días, equipo', decía, y sus hijos respondían en coro: '¡Buenos días, mami!'. Andrés era el mayor y siempre ayudaba a su mamá a preparar las mochilas antes de salir.

Valeria se encargaba de regar las plantas porque decía que les daba 'buenos días' a las flores. Andrés también era el encargado de darle de comer a los gatos y terminaba persiguiéndolos por toda la casa. Un día, en la escuela, la maestra pidió que los niños hablaran sobre su familia. Algunos compañeros hablaron de sus papás, y otros de sus hermanos.

Cuando llegó el turno de Andrés, dijo: 'Valeria y yo tenemos una mamá que es increíble. Es como tener a tres personas en una, porque siempre encuentra tiempo para nosotros'. Los otros niños lo miraron, curiosos. '¿Y su papá?', le preguntaron. Andrés sonrió y respondió: 'No tenemos papá, pero no lo necesitamos. Mi mamá es lo mejor, siempre nos da sorpresas y nos consiente mucho, ¡la amamos!'

Y sí, así era Mariana: siempre les preparaba su postre favorito o los sorprendía llevándolos por una hamburguesa. Esa noche, antes de dormir, Andrés le dijo: 'Mamá, hoy en la escuela hablamos de nuestras familias y dije que tú eres una superheroína porque haces todo por nosotros'. Mariana rió y respondió: 'Gracias, mi amor, pero no soy una superheroína. Solo soy una mamá que los ama profundamente'.

¿Qué son los hogares monoparentales encabezados por mamás solteras?

Los hogares monoparentales son aquellos en los que solo uno de los padres vive con los hijos, puede ser mamá o papá, y es quien se encarga de cuidarlos y procurar su bienestar. En el caso de las madres solteras, significa que es mamá quien se ocupa de todo, desde llevarlos a la escuela hasta preparar las comidas, ayudar con la tarea y cubrir sus necesidades financieras.

A veces, los niños se preguntan por qué no tienen un papá en casa como sus amigos, y ahí es cuento se debe explicar que las familias son diferentes y todas son especiales a su manera. Una mamá soltera es quien hace todo lo posible para que sus hijos sean felices, seguros y estén bien cuidados. A veces puede parecer difícil, pero las mamás solteras son muy fuertes y pueden hacer muchas cosas por sus hijos.

Ellas no solo trabajan, juegan y enseñan, sino que también están ahí para dar abrazos cuando alguien se siente triste. Ser mamá soltera no significa que esté sola porque en la mayoría de las veces cuentan con la ayuda de los abuelos, tíos, amigos o vecinos que también quieren mucho a los niños. Tienen una red de apoyo sólido que les brindan soporte.

Los hogares monoparentales están tan llenos de amor como cualquier otro tipo de familia y lo más importante no es si hay uno o dos padres, sino que los niños se sientan queridos y cuidados. Quienes viven en un hogar con una una mamá soltera, son parte de una familia única y especial, igual que las demás porque en cada familia lo más importante es el amor que se tienen.

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