De la cuna a la cama. Poema corto para niños que se hacen mayores

Cuando un niño empieza a crecer ¡ya no quiere dormir en cuna! Por eso 'De la cuna a la cama', un poema corto para niños que se hacen mayores, es para aquellos peques que ya no quieren dormir en cuna porque ya son niños grandes. A través de esta poesía corta te darás cuenta cómo un niño empieza a hacer la transición de la cuna a la cama.

Además, como siempre, te sugerimos algunas actividades de comprensión lectora y unos tips infalibles para hacer que el niño duerma en su propia cama. Con nuestros consejos este paso inevitable será mucho más fácil, tanto para él en su desarrollo como para ustedes como papás, ya que también podrán verlo como el niño grande en que se está convirtiendo, ¡sin dejar de ser su bebé!

Poema corto para niños que ya son grandes - De la cuna a la cama

Este sencillo poema corto nos explica el sentimiento de los niños cuando se hacen mayores: simplemente ¡ya no duermen en la cuna! Ahora duermen en su propia cama:

Mi hermano viene contento
con su mono de pijama,
hoy no dormirá en su cuna
porque dormirá en la cama.

¡Ya eres grande como yo!,
le digo muy divertido.
Mientras nos cuentan un cuento
viene a la cama conmigo.

Pero cuando estiro el brazo
y le golpeó en la cara
enseguida se levanta
y va a dormir a su cama.

Ya no quiere ir a la cuna
mi hermano se hace mayor.
Dormimos los dos contentos
en la misma habitación.

Actividades de comprensión lectora sobre el poema corto

A continuación te dejamos estas sencillas preguntas de comprensión lectora, seguramente tu hijo ya puso mucha atención:

1. ¿Qué lleva puesto el hermano menor?
2. ¿Por qué el hermano menor no dormirá en su cuna?
3. ¿Qué sucede cuando el hermano mayor golpea accidentalmente al otro la cara?
4. ¿Dónde decide dormir el hermano menor al final de la poesía?
5. ¿Qué quiere decir la frase 'mi hermano se hace mayor'?
6. ¿Dónde duermen los dos hermanos al final del poema?

Lean el poema las veces que sean necesarias para que tu hijo pueda contestar correctamente. También puedes pedirle que te diga porqué no quiere dormir solo en su cama aún, si hay algún temor y pídele que lo dibuje. También puede ser buena idea hacer que tus otros hijos cuenten anécdotas de cómo fue dejar la cuna para ya dormir como niños grandes en su propia cama. ¡Seguro se divertirán!

Consejos prácticos para que los niños duerman de la cuna a la cama

Sabemos que la transición de la cuna a la cama puede ser un momento que puede causar estrés a los niños y los padres, pero también puede llevarse a cabo con éxito. Aquí hemos reunido algunos consejos para hacer que este paso sea más sencillo:

• No fuerces el momento. No hay una edad específica para que un niño deba pasar de la cuna a la cama. Mientras algunos lo recomiendan a los 2 años, otros pueden esperar hasta los 4 años. Incluso muchos más pasan de esa edad y otros duermen solos desde bebés. La clave es esperar hasta que el niño esté listo y no forzar la transición.
• Involucra a tu hijo. Deja que elija su nueva cama y ropa de cama, por ejemplo, para que se sienta emocionado por el cambio.
• Haz que sea gradual. Mantén la rutina de dormir de tu hijo para que se sienta seguro y cómodo, pero un par de noches dile que debe dormir en su nueva cama. Si por algún motivo no quiere, permite que duerma en la cuna de nuevo, pero dile que sus siestas las tomará en la cama y así sucesivamente.
• Sé muy paciente. Como la transición suele ser difícil para los niños, es importante tener mucha paciencia y apoyar a tu hijo en todo el proceso. No lo regañes si de pronto no quiere dormir en su cama.
• Celebra su logro. Felicita a tu hijo cuando se acueste en su cama, más si lo hace por sí mismo. Hazle saber que estás orgullosa de él por haber hecho el cambio y celebra cada noche que logre dormir de corrido.

¿Qué hago si mi hijo no quiere dormir en su propia cama?

Es muy común que los niños no quieran dormir solos en su propia cama y prefieran dormir con sus padres o hermanos mayores. Si bien es importante que le brindes seguridad y afecto a tu hijo, también es importante enseñarle a dormir solo en su propia cama, lo cual puedes conseguir a través de la rutina, pero hacer el cambio a la cama, por ejemplo, en el día con alguna de sus siestas.

Crear un ambiente acogedor en su habitación hará que tu hijo quiera pasar más tiempo ahí. Quizá decorarla con sus personajes favoritos, dejar que ponga los peluches que quiera y que elija una almohada suave. Es vital que lo tranquilices si tiene miedo a estar solo, para ello puedes darle un objeto de apego y decirle que puede conservarlo por las noches y hasta que se sienta seguro.

Eso sí, si ya has tomado la determinación de hacer el cambio de la cuna a la cama deber ser firme, así que tocará regresarlo a su cama si se despierta y quiere ir a la cama de sus hermanos o a tuya, háblale con cariño pero firme y llévalo de vuelta. Si le cuesta trabajo, puedes sentarte con él y calmarlo, pero no permitas que se duerma en otro lado que no sea su cama.

Puedes decirle que leerán no uno, sino dos cuentos para que pueda dormir mejor o proponle que él elegirá la cena del día siguiente si duerme en su propia cama durante toda la noche, ya que es un niño grande. Es decir, dale pequeños incentivos que lo hagan sentir que está en control de la situación y que puede tomar decisiones. ¡Verás que poco a poco logrará dormir en su cama!

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