Practica la meditación diaria para relajar y conectar con tu hijo

Los nervios por el examen de matemáticas, la preocupación por ese trabajo en grupo que tienen que hacer o la intensidad que sienten al notar que las vacaciones están al caer pueden relajarse con tan solo practicar la meditación diaria con nuestros hijos. Y es que hacer yoga y mindfulness con los niños tiene tantos beneficios físicos, mentales y emocionales que no tardarás en darte cuenta de lo bien que les sienta. Mariana Capurro, psicóloga, profundiza en las ventajas que supone para padres y maestros que los niños aprendan a respirar de forma consciente.

El yoga y la meditación no son solo cosa de adultos. Los niños también pueden disfrutar de esta práctica tan saludable y motivadora. De hecho, es ideal para conectar con nuestros hijos a nivel emocional.

Conecta con tu hijo a través de la meditación diaria

Para poner en práctica la meditación en casa, a través del yoga y el mindfulness, y poder conectar a un nivel emocional más cercano y positivo tan solo has de comenzar con las siguientes ideas:

• Aprendemos juntos a respirar de forma consciente: cogemos aire por la nariz y lo soltamos por la boca, despacio, como si tuviéramos una pajita. Haz este ejercicio al principio y al final de cada sesión de yoga.
• Intenta que las sesiones de yoga sean divertidas. Te servirá para captar la atención de los niños, sobre todo si son muy pequeños. Puedes, por ejemplo, buscar posturas de yoga con animales, poner música relajante de fondo o incluso cantar canciones infantiles.
• Aprovecha estos momentos de calidad para trabajar las emociones o conflictos que hayan sucedido ese día. También podéis comentar cómo se sienten por hechos cercanos como los exámenes o la excursión escolar que está próxima.
• Ten en cuenta que, si deseas que tus niños se aficionen a la meditación, primero de todo deberás ser tú quien la lleve a cabo. Ya sabes que para ellos siempre eres un espejo en el que mirarse.
• Al terminar la sesión de yoga o meditación, pregúntales qué les ha parecido, si se han sentido cómodos, qué es lo que más les ha gustado y lo que menos. Así podrás coger ideas para la siguiente sesión.

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Cómo hacer yoga y mindfulness con niños en la escuela

Si como docente o maestros quieres que tus alumnos prueben a hacer meditación, aquí tienes unos tips para comenzar. Proponles hacer ejercicios sencillos de yoga o de mindfulness antes de las claves o en el cambio de actividad para promover la conexión entre los compañeros y la relajación general del grupo.

• El yoga será de gran utilidad para que tus alumnos liberen la tensión y dejen paso a la concentración, por lo que no dudes en dedicarle unos minutos al comienzo del día.
• De igual modo, a la vuelta del recreo, antes de hacer un examen o en cualquier otro momento que veas que es necesario diles que cierren los ojos y haced juntos unas cuantas respiraciones de forma consciente.
• Los ejercicios de visualización guiada ayudan a la relajación en grupo ¡no dejes de probarlos!
• Pero si quizás es la primera vez que lo hacen o bien porque son muy pequeños, puede que las posturas de yoga sencillas de animales sean las más indicadas para ellos.
• Gracias a todo esto estarás enseñando a tus alumnos a mantener la concertación, a focalizarse en el momento actual e incluso a manejar mejor sus propias emociones y las de sus iguales pues sabrán ponerse en el lugar del otro.

Beneficios de la meditación y yoga para los niños

El mindfulness o atención plena nos propone ejercicios para ser más conscientes del momento presente. Y esa quizás sea su ventaja más destacable: darte cuenta de lo que estás viviendo aquí y ahora sin pensar en nada más.

De este modo, al estar serenos y relajados y a través de la respiración profunda, los niños se sienten más tranquilos, seguros y menos estresados. Pero este no es el único beneficio de las posturas de yoga. También lo es el hecho de liberar la tensión y, como consecuencia directa, la mejora de la atención, concertación y el enfoque. Resulta de especial ayuda para aquellos niños que tienen dificultades en esta área.

Por otro lado, el yoga y la meditación potencian enormemente la autoestima y la autoconfianza ya que los niños aprenden a aceptarse a sí mismos y a quererse tal y como son. La meditación también resulta de muchísima utilidad en las habilidades sociales dentro y fuera del aula, en el desarrollo de la autodisciplina y la autorregulación e incluso en la resolución de conflictos. Asimismo, ayuda a mejorar la calidad del sueño puesto que, al realizar esta actividad física, estarán más tranquilos.

También tenemos que destacar el beneficio de que les ayuda a desarrollar la empatía y la compasión hacia los demás. Debido a que están prestando una plena atención a sus sentimientos serán más conscientes de las emociones que viven los demás.

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