Lesiones deportivas más frecuentes en niños y niñas futbolistas

En los últimos años se ha producido un aumento en las lesiones deportivas en niños y niñas futbolistas. Y es que cuando se practica un deporte específico sin la correcta preparación física pueden aparecer desequilibrios musculares. Analicemos las causad de estas lesiones, las consecuencias y el tratamiento para las mismas. 

Por qué se producen las lesiones deportivas en el fútbol 

Varios factores pueden influir en este incremento de lesiones deportivas en futbolistas. Cada vez son más los jóvenes que practican deportes de competición, donde hay más exigencia y en ocasiones se produce un sobreentrenamiento. Y, por otro lado, el número de horas de entreno a la semana para niños en edad de crecimiento a veces es excesivo y esto aumenta los riesgos de lesión, ya que no se respetan los tiempos necesarios para el reposo muscular y articular.

En el caso del fútbol, suele producirse un desequilibrio agonista-antagonista. El agonista (es el músculo que se contrae, cuádriceps que normalmente está muy fuerte) y el antagonista (es el músculo que se relaja y estira isquios, suele estar más débil y acortado). Si existe mucha diferencia en la fuerza de ambos grupos musculares, aparecerán lesiones, sobre todo a nivel de los isquios.

Por eso es importante un buen calentamiento y entrenamiento completo, donde se realicen ejercicios excéntricos de isquios, y se trabaje el core para evitar desequilibrios con los aductores, que puedan producir las temidas pubalgias. A veces también puede influir el uso de una superficie de terreno o calzado inadecuado.

Las articulaciones de los niños son diferentes a las de los adultos, debido a la presencia del cartílago de crecimiento, las epífisis y apófisis cartilaginosas. El hueso de los niños es más poroso y presenta más potencial de remodelación. Es importante que las fracturas queden bien alineadas para evitar angulaciones. Con los años, los huesos se hacen más rígidos y las placas de crecimiento se cierran.

Las lesiones deportivas más comunes en niños y niñas que practican fútbol 

Los pequeños presentan más elasticidad en músculos, tendones y ligamentos, por eso en ellos son más frecuentes lesiones en cartílagos de crecimiento, núcleos de osificación y apófisis, ya que son zonas que sufren más con las fuerzas de tracción y compresión.

Lesiones ligamentosas y musculares son menos frecuentes y, en contra, las más habituales son las contracturas, los esguinces de tobillo y rodilla, las contusiones, distensiones, lesiones intraarticulares de rodilla, desgarros y pubalgias. Además, las zonas más afectadas son tobillo y pie, rodilla y muslo.

En cuanto a las más agudas, destacar las fracturas por avulsión osteocondrales, fractura de la espina tibial anterior, lesión del ligamento cruzado anterior (sobre todo en adolescentes) y avulsión del polo inferior de la rótula.

Por último, hay que hablar de las lesiones crónicas. Se producen por sobrecarga, debido a fuerzas de tracción o de compresión. Las lesiones más frecuentes son osteocondritis disecante (donde el hueso muere por falta de aporte sanguíneo y parte de ese hueso puede desprenderse y dificultar el movimiento articular.Suele darse en la rodilla o en zonas de inserción de musculatura ) y enfermedad de Server, que es la causa más típica de dolor de talón en niños que practican deporte. Estas lesiones mejoran con reposo deportivo y frío. 

Tratamiento para las lesiones deportivas

Realizar una preparación física correcta es fundamental para evitar lesiones. Hay que hacer estiramientos de cadenas musculares, trabajar el core, la propiocepción, ejercicios pliométricos, y excéntricos de isquios sobre todo. También es importante respetar los reposos y tener una buena alimentación e hidratación.

El tratamiento inicial en el terreno de juego vendrá dado por la aplicación de frío (en spray o en forma de hielo, y según la gravedad de la lesión se realizará un vendaje funcional o una inmovilización). Los vendajes funcionales permiten el movimiento de la articulación implicada, evitando solo aquel que ha producido la lesión. Son cómodos y dan seguridad y confort al deportista.

Se realizarán diversas técnicas según se encuentre la zona a tratar.

- Se suelen realizar movilizaciones y manipulaciones de las distintas articulaciones para que tengan el rango de movimiento óptimo.

- Masaje para drenar la inflamación (si la hay) en caso de lesiones agudas. 

- Y también para relajar musculatura contracturada, estiramientos, ejercicios de tonificación de la musculatura débil, ejercicios de propiocepción para evitar recidivas.

- Podremos ayudarnos de electroterapia, ultrasonidos, láser, magnetoterapia, termoterapia, baños de contraste, onda corta o radiofrecuencia.

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