Ejercicio de meditación guiada en vídeo para dormir a los niños rápido

El mindfulness tiene muchos beneficios para los niños y para los adultos. No solo nos ayuda a sentirnos más conectados con el momento presente, sino que nos ayuda a relajarnos antes de irnos a la cama. A continuación te proponemos un ejercicio de meditación guiada en vídeo que te ayudará a dormir más rápido a tus hijos (o dormirte tú misma más fácilmente).

A continuación encontrarás la meditación por si prefieres hacerla leída que en vídeo. Puedes leérsela a tus hijos cuando se vayan a la cama para que se vayan relajando para conciliar el sueño. ¡Buenas noches! ¡Buen mindfulness!

Mindfulness o meditación guiada en vídeo para niños

Shhhh... Cierra los ojos, pon las manos sobre tu vientre y respira. Tan solo coge aire por la nariz y suéltalo también por ella.

Siente cómo tu vientre crece cuando inspiras, cuando coges aire; y siente cómo se deshincha cuando lo sueltas.

Presta atención al viaje amable que realiza el aire desde que entra en tu cuerpo hasta que llega a tu diafragma, y cómo poco a poco vuelve a recorrer cada una de esas partes y rincones hasta que sale. ¿Eres capaz de seguirlo? Vamos a probarlo. Inspira y coge aire siguiendo cada bello y valioso lugar por el que pasa y cómo poco a poco va deshaciendo ese camino hasta que sale.

Tú solo inspira y espira... Déjate llevar. Ahora, vas a prestar atención a los sonidos que puedes percibir en tu entorno, en tu habitación, en tu hogar o, incluso que vienen de la calle. Nada te altera. Estás es un lugar seguro dentro de ti; tú solo inspira y espira. Y siente cómo tu vientre sube y baja. Con cada respiración vas sintiendo más y más calma, más y más tranquilidad. Inspira y espira...

A continuación, vas a imaginar que pones unos tapones muy suaves y cómodos en tus oídos. Ahora, ya no escuchas los sonidos de fuera, sino que vas a poner toda tu atención en escuchar los sonidos que hay dentro de ti.

Presta atención al sonido del latido de tu corazón mientras inspiras y espiras... ¿suena fuerte o bajito?, ¿rápido o lento? Con cada respiración le damos las gracias por estar ahí. Gracias corazón por latir cada segundo para mí. Inspira y espira... Ahora, vas a poner toda tu atención en los sonidos de tu estómago. ¿Está tranquilo, en calma, o sientes que se mueve y ruge? Presta atención al sonido de tu estómago mientras inspiras y espiras... Gracias estómago por recibir cada alimento que me nutre y me llena de vida. Gracias por estar ahí para mí. Ahora, vas a poner toda tu atención en los sonidos de tu mente. ¿Está calmada o sientes que se ha llenado de pensamientos sobre el colegio, la familia o amigos?

Presta atención a los pensamientos de tu mente y míralos; obsérvalos. Salúdalos si quieres y deja que se vayan flotando. Ningún pensamiento puede alterarte, son solo eso, pensamientos. Estás en un lugar seguro dentro de ti, tú solo inspira y espira. Y siente cómo tu vientre sube y baja. Con cada respiración vas sintiendo más y más calma, más y más tranquilidad. Gracias mente por estar ahí para mí. Inspira y espira... Voy a pedirte que vuelvas a poner de nuevo toda tu atención en tu respiración y en el viaje que realiza desde que entra hasta que sale. Siente en la palma de tus manos como tu vientre sube y baja de forma lenta, agradable, calmada, tranquila... Gracias a cada una de las partes de mi cuerpo por estar aquí para mí. Cada una de ellas crean el espacio que necesito para sentirme seguro y tranquilo, con tan solo cerrar los ojos y respirar.

Consejos para ayudar a los niños a dormir mejor

Este ejercicio de meditación guiada es fabuloso para ayudar a los niños a dormir mejor, aunque realmente puede hacerse en cualquier momento del día para alcanzar la calma y la relajación. Una dinámica mindfulness como esta, además, ayuda a los niños a ser más conscientes de su propio cuerpo.

Si vas a usar el mindfulness para ayudar a que tus hijos duerman mejor, ten en cuenta también algunos de las siguientes pautas que les ayudarán a tener una mejor higiene del sueño.

- Establecer rutinas de sueño que se repitan todos los días: desde acostarse y levantarse siempre a la misma hora hasta realizar los mismos rituales a diario para predisponer a los niños a irse a la cama.

- Estos rituales antes de dormir deben relajar a los niños. Cada familia es diferente, pero pueden ayudarte las siguientes actividades: baño, cena, cuento, nanas.

- Hacer ejercicio físico a diario, pero debemos evitar que los niños estén especialmente movidos en las horas previas a irse a la cama.

- Debemos intentar que los niños cenen pronto y comida ligera. Las frutas y verduras son siempre una gran opción.

¡Buenas noches!

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