Problemas de oído en los niños - Síntomas y causas más comunes

Los problemas de oído en los niños, sus síntomas y causas más comunes, pueden provocar hipoacusia o pérdida de audición en los pequeños. La pérdida auditiva infantil puede ser de nacimiento o bien puede irse desarrollando a medida que el niño crece y su sistema auditivo madura. Existen diferentes causas de la pérdida de audición infantil, así como diferentes grados y tratamientos.

Es por ello que aquí te diremos cuáles son los enemigos de los oídos de los niños para que estés atenta y puedas identificar alguno de los signos que puedan estar dando la señal de alerta de que algo pasa con la audición de tu hijo. Es vital la higiene adecuada de los oídos del niño, así como evitar la exposición a ruidos muy fuertes. Te contamos más.

Problemas de audición más comunes en los niños

En la primera infancia, los problemas de audición más comunes son los secundarios a las otitis de repetición que sufren los niños. La otitis media aguda de repetición es una afección que produce dolor en el oído del niño, así como también irritabilidad y fiebre en algunas ocasiones. Sin embargo, la pérdida de audición puede ser el único síntoma que muestre nuestro hijo, por lo que debemos estar muy pendientes de cómo este interactúa con nosotros, con los amigos en el colegio, etc.

Es importante diferenciar las otitis: están las otitis externas de verano, las cuales no causan una gran pérdida de audición, y las otitis medias agudas del invierno, las cuales sí causan una pérdida de audición. Además, nuestro hijo también puede sufrir una otitis serosa, la cual afecta al moco interior del oído.

En este caso, nos encontraremos con un niño que:

• No atiende bien.
• Tendremos la sensación de que unos días oye mejor que otros.

Sin embargo, esta es la etiología más frecuente en la pérdida de audición en esta primera etapa.

Tipos y grados de pérdida auditiva a cualquier edad

Cuando hablamos de pérdida auditiva, debemos diferenciar entre 4 tipos diferentes:

1. La pérdida auditiva conductiva
   Es aquella que se da cuando hay un bloqueo en el oído que no permite que el sonido pase al oído medio.
2. La pérdida auditiva neurosensorial
   Aquí estamos hablando de una alteración en el oído interno o bien en el nervio auditivo.
3. La pérdida auditiva mixta
   Es aquella que se debe tanto a la pérdida conductiva como a la neurosensorial.
4. La pérdida auditiva por el espectro de neuropatía auditiva
   Hace referencia a aquella pérdida de audición que se debe, principalmente, a que el sonido no se procesa adecuadamente; este mal procesamiento del sonido hace que el cerebro no lo pueda interpretar de manera correcta.

Además del tipo de pérdida auditiva, también es importante destacar que esta puede ser leve, moderada, grave y profunda. Una persona diagnosticada con una pérdida auditiva leve podrá escuchar algunos sonidos normales, pero presentará problemas a la hora de escuchar los más bajos.

Cuando la pérdida es moderada, la persona será incapaz de escuchar casi ningún sonido que se emita a un volumen normal. La pérdida grave es aquella en la que ya solo se perciben sonidos fuertes y, la profunda es aquella en la que solo se oyen sonidos muy fuertes.

En cualquiera de los casos, una pérdida de audición puede ser tratada, por lo que es necesario acudir al especialista cuanto antes si tenemos la sospecha de que nuestro hijo pueda sufrirla.

¿Cuándo se debe llevar al niño con el especialista?

En el momento en el que veamos que nuestro hijo no acaba de comprender bien lo que le decimos o bien si desde la escuela se nos avisa de un posible problema de audición será necesario acudir al pediatra para que pueda evaluar la necesidad de acudir a un especialista. En la consulta, el pediatra nos hará unas preguntas y revisará el oído del niño.

Si no es algo complicado, él mismo nos indicará el tratamiento que debemos seguir. Por el contrario, si el pediatra no está seguro de la causa, lo más probable es que nos envíe al otorrinolaringólogo. En la consulta del otorrino, este practicará unas pruebas a nuestro hijo, mediante las cuales podrá determinar la causa y la severidad de la pérdida auditiva.

Con ello, nos podrá indicar cuál es el mejor tratamiento para nuestro hijo, el cual puede ir desde una simple medicación, a cirugía, implantes cocleares o audífonos. Sin embargo, y como complemento a los tratamientos prescritos, será necesario una atención logopédica, así como una adaptación curricular por parte de la escuela.

La pérdida de audición infantil puede deberse a muchas causas diferentes y no todas ellas requieren de tratamiento. Sin embargo, es fundamental ponernos en manos de especialistas que valoren a nuestros hijos y les ofrezcan el tratamiento más adecuado en todos los casos para evitar los problemas de oído en los niños, sus síntomas y causas más comunes.

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